La Marea de Pérez Henares

Cuando se levante el telón del 20-D

Cuando el día 20-D se levante el telón de la urna una cosa ya es segura. El escenario será otro, la mayoría de los actores protagonistas no serán los mismos y hasta paisaje de fondo, que durante casi ya 40 años se ha mantenido, tan solo con cambios de inquilino en la casita del fondo, será muy diferente. Donde había sillas para dos o todo lo más dos y medio y un nacionalista con el cazo ahora habrá cuatro o quizás tres y medio. El tuya o mía se habrá acabado. Aunque tal vez a alguno se le acabe más que a otro y hasta no es descartable que en el mismo estreno algún cabecera de cartel no llegue a la función siguiente.

Pero esto último son cábalas fundadas en otras que se llaman encuestas y que no dejan de ser pájaros volanderos que no están en la cazuela hasta que el voto está en la urna. Lo único que en verdad puede afirmarse es que el panorama político, el paisaje del que no hemos salido en todo este tiempo va a ensancharse, abigarrarse y cambian de una manera decisiva, que iremos luego viendo cuando el juego siguiente, el de los pactos por el poder y las mayorías comience. Y ahí la especie y los especímenes que no se adapten al nuevo ecosistema, al Medio, ya saben, se extinguen. Las leyes de la evolución son implacables. Y más en la política. Pero ojo, que eso sirve por igual para los que ya estaban como para los que llegan de nuevos. Por ser joven no se tiene asegurado nada y hasta, en realidad se corren, por inexperiencia más riesgos que pueden resultar letales. En la naturaleza pasa y es ahí, en esa franja, donde la mortandad se ceba. Tanto en leones como en impalas. La pretensión efebocrática de contraponer el binomio joven/bueno a viejo/malo es, como poco, una memez soberana. Los “viejos”, que por lo visto somos todos los demás de 40 a no ser que se prosiga en pose de adolescente inmaduro, al menos llevan de ventaja contrastada alguna capacidad de supervivencia. Ya es algo, ante la nada.

Nuestro, hasta hace nada inmutable, paisaje político era un baile reservado para dos y donde si hacía falta pareja ya se sabía quien era, pero también lo cara que salía y no solo en dinero, que de muchos de aquellos polvos vienen estos lodos separatistas de ahora. Y eso es lo que esencialmente va a cambiar, aunque se mantenga incluso el mismo como gallo del corral, aunque seguro que con menos plumas. Pero tendrá replica segura de mas de un kikiriki. Que a lo mejor, esa es otra, el corral se nos pone imposible de cacareos por doquier y sin conclusión. Lo iremos viendo, gustando o sufriendo.

Pero así va a ser. En el juego del poder, cuatro, o tres y medio por lo menos, van a llevar cartas y las van a jugar. Dos más. Pero uno menos, porque con este panorama la “novia” de siempre, que además se ha puesto imposible con el traje de la secesión, el nacionalismo catalán ni as ni pinta ya va a llevar. Y hasta lo que le puede pasar es que le caiga el basto.

Hay quien percibe la novedad como amenaza, y riesgos como cualquier cambio, evidentemente conlleva, pero mi impresión es que la sociedad la percibe como esperanza y entre ellos me incluyo. Cada vez más tranquilamente porque hasta los asaltacielos que despreciaban a la Consitución, la Transición y la Democraia, como papelajo, rendición y Regimen tardo franquista ya dicen, aunque a lo mejor no sientan, que fue cosa positiva y libertad. Sea por convicción y contrición, que me parece que no, o por cálculo al darse cuenta de que por ahí no los siguen ni tres, lo cierto es que se han amansado una barbaridad.

Los españoles necesitamos un nuevo impulso, valorando en lo que vale, que es mucho lo que tenemos y hemos logrado, pero regenerando las arterias y limpiando las acequias de cieno y broza acumuladas. Y en eso está mucha gente, y eso es lo que con el voto hay que concretar. Hay ganas de volver a la Política en mayúsculas y por eso hay tantas de votar. Ello es lo mejor, lo más productivo y hasta hermoso que podemos hacer. Me trae buenos recuerdos, porque cuando aquello sucedió por aquellos años de los 70 fue para bien. Para muy bien.

GRAN SELECCIÓN DE OFERTAS MULTI-TIENDA

CONSOLAS

ACTUALIZACIÓN CONTINUA

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Antonio Pérez Henares

Ejerce el periodismo desde los 18 años, cuando se incorporó al diario Pueblo. Ha trabajado después en publicaciones como Mundo Obrero, Tiempo, El Globo o medios radiofónicos como la cadena SER. En 1989 entró al equipo directivo del semanario Tribuna, del que fue director entre 1996 y 1999. De 2000 a 2007 coordinó las ediciones especiales del diario La Razón, de donde pasó al grupo Negocio, que dirigió hasta enero de 2012. Tras ello pasó a ocupar el puesto de director de publicaciones de PROMECAL, editora de más de una docena de periódicos autonómicos de Castilla y León y Castilla-La Mancha.

Lo más leído