La verdad, no puedo creerme que Sánchez se crea lo que dice creerse, que intente formar un gobierno de progreso con los partidos progresistas, en primer lugar porque ya no existen partidos progresistas, y menos en la política española, como no sean los de derechas, yo no veo ninguno de los que dicen llamarse de izquierdas que lo sea, todos están de regreso, no de progreso, todos son nostálgicos del pasado, unos proponen proyectos ya ensayados y fracasados, otros proponen la autodeterminación, como si las autonomías fuesen colonias del Estado Español y otros simplemente la independencia a secas ¿es eso progresismo?. No, no lo es, ¿se lo cree Sánchez?, tampoco.
¿Es tanto su odio al Partido Popular que intenta impedir por todos los medios que éste gobierne?: tampoco, y tampoco es tan tonto como para pretender que no sabe sumar. ¿Por qué se enroca de esta manera?, muy sencillo, para sobrevivir, piensa en si mismo, busca aire, busca tiempo.
Lo que interesa, es consumir los dos meses de plazo para formar gobierno, que empezarán a contarse a partir de día 13 para que transcurridos estos, no de tiempo a convocar el congreso del PSOE, ya que no sería conveniente elegir un nuevo secretario general, en plena campaña electoral, para las predecibles, próximas y anticipadas elecciones, y seguir siendo secretario general y candidato.
Piensa en él, no le importa el Estado, ni siquiera su propio partido si no es para ser su líder, así de simple.
Lo que pasa, es que ha tenido mala suerte,cuando nadie lo esperaba, in extremis, se ha puesto en marcha el show independentista catalán, le va a costar mucho resistir las presiones para que facilite la gobernabilidad y sobre todo, para justificar una alianza con Esquerra Republicana de Cataluña que está liderando una inconstitucionalidad, tampoco con Podemos, por lo bocazas de Pablo Iglesias, y por sus aliados electorales independentistas.
Mala suerte Pedro, a ver como sales de esta.
