Hasta el dos de mayo hay tiempo para llegar a acuerdos entre los partidos y lograr la investidura del candidato. En caso negativo, se celebrarán nuevas elecciones el 26 de junio lo que parece improbable porque el objetivo último de los partidos políticos es ocupar el Poder.
La oportunidad de hacerse con el Gobierno de España no la van a desaprovechar ni el PSOE de Pedro Sánchez y, menos aún, Podemos que son tecnócratas que sueñan con asaltar las instituciones y subvertir el orden del sistema. Están enfermos de protagonismo multimedia.
Asalto al Poder
Ciudadanos, invitado de piedra, ocupa hueco en el escenario pero, en ningún caso, hace posible el gobierno PSOE + Cs sin la abstención de Podemos. Se van a sentar los tres a buscar la salida.
Si Podemos se abstuviera y Ciudadanos mantuviera el pacto con el PSOE, Pedro Sánchez entraría en La Moncloa con algún voto del PNV, CC y la abstención de ERC y los ex convergentes de DyL.
El pack PSOE+Cs+ Otros podría sumar 140 diputados, por encima de los 123 del PP. Resultado, asalto al Poder que sirve a los intereses de quienes participan en él.
Sánchez, presidente in pectore
Pedro Sánchez presidente del Gobierno. Gozo y colmo de todos los anhelos y aspiraciones del líder del PSOE al que dejarían de llamarle «el breve».
Ciudadanos, incomprensiblemente, se ha convertido en la muleta del PSOE y de conducir a España por un camino incierto y de riesgos inimaginables. Albert Rivera lo va a tener difícil de explicar si hay nuevas elecciones. Un papel de «Pepito el grillo» que, tampoco, pasa nada.
Podemos, genial. Otro sueño hecho realidad. Líder de la oposición, caudillo de una de las dos Españas. Fase I alcanzada. «Ya somos el centro de la política en España y vamos a convertirnos en un referente europeo» sueñan. Hacen política «al estilo moderno pero con las ideas rancias del comunismo y lucha de clases» les critican.
Los nacionalistas vascos pueden sumarse al gobierno PSOE+Cs sin, por supuesto, entrar en el gobierno y a cambio de concesiones y reformas que propicien un avance hacia la independencia.
Los independentistas a favor
Para que los independentistas catalanes de ERC y DyL pueden llegar a votar no y liberar al supuesto gobierno de Sánchez la carga de contar con el respaldo implícito de los que «quieren romper España«.
La tormenta perfecta para hacer el ridículo dentro y fuera. Por instinto de supervivencia y experiencia, pienso, «España se basta y se sobra» para defenderse de quienes pretenden ir en contra de su identidad como un pueblo y Nación con proyección en el tiempo.
Y el PP, un partido apestoso, según el resto. Corrompido por la corrupción, con un presidente consciente de tomar decisiones personales difíciles, un gobierno en funciones medio noqueado. Sin ningún margen de movimiento. Abocado a nuevas elecciones para dejar claro porqué los grandes partidos no pueden entenderse en España. Hasta entonces, no habremos obtenido el aprobado en democracia.