Carmen Tomás

A las puertas de un gobierno

A las puertas de un gobierno
Carmen Tomás. PD

 España por fin contará con un gobierno. Habrán hecho falta más de 300 días para evitar el esperpento de unas terceras elecciones. Hoy se reúne el Comité Federal del PSOE para decidir la postura que adoptarán en la previsible investidura de Mariano Rajoy. Cierto que a esta hora aún las cosas están cogidas con alfileres.

Como se ha puesto de moda entre el socialismo de gestora, hay muchas cosas que coser aún. Por ejemplo, que sean mayoría los partidarios de la abstención y de ser así, cómo se ejecuta esa decisión. Es decir, votarán en bloque o sólo los 11 estrictamente necesarios para que Rajoy sea investido. Habrá que esperar algo más para tener todos los datos.

Sin embargo, no hay que esperar para ver claro que España se ha perdido un año de reformas, de crecimiento y de más empleo. Ahora, si el candidato del PP puede formar gobierno, habrá que abordar sin pausa la elaboración de unos Presupuestos Generales del Estado del que dependen más de 14 millones de españoles y de una serie de reformas decisivas para el futuro como la del sistema público de pensiones.

Esta semana precisamente, las pensiones han sido centro de discusión por varias razones. Primero fue la propuesta presentada en el Congreso por todos los partidos menos PP y Ciudadanos de subir las pensiones en 2017 de acuerdo con la inflación prevista (1,4 por ciento) en lugar de con arreglo a la ley (0,25 por ciento) lo que supondría alrededor de 1.400 millones de euros; la constatación de que el fondo de reserva, la llamada hucha de las pensiones, tiene fondos por valor de unos 20.000 millones y la propuesta de la ministra de Empleo en funciones, Fátima Báñez, de que se pueda compatibilizar el cobro del 100 por 100 de la pensión con la obtención de ingresos por trabajo.

Además, el INE avisaba de que con las actuales tendencias demográficas, España perderá 5,4 millones de habitantes en 50 años. Aumentarán las defunciones y disminuirán los nacimientos, lo que supone invertir la pirámide, base del sistema de pensiones. La pregunta que cabe hacerse es si con estos datos serán capaces los políticos de abordar las tensiones que se manifestarán en el sistema de pensiones, que desde luego no será sostenible a largo plazo si no se toma en serio.

Claro que las tensiones serán menores si hay más trabajadores cotizando, como asegura el gobierno. La cuestión es si será suficiente, dado que los pensionistas serán más y cobrarán más años, mientras que la población joven se reducirá.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído