A Ronald Regan se le critico hasta la saciedad (yo también), después resulto que fue bueno para el país y para el mundo, Fue El que pidió que se derribara el muro de Berlín, fue El que inicio el proceso de democratización de Rusia, fue su guerra «Galáctica» el motivo del declive de Rusia, fue El el que acepto y arreglo la situación de millones de indocumentados y con el beneplácito de su partido, fue cuando gobernaba Pte. Bush Padre, que se derribó el muro (también REP), SI la misma RUSIA, la que ha renacido con el gobierno Demócrata de Estados Unidos, una Rusia que vuelve a encerrar a sus opositores. La izquierda Internacional tiene una memoria muy selectiva, presento algunos de mis respuestas a comentarios que aparecen en estos días.
A Raúl del Pozo: Que Trump tiene y va a tener enemigos es una evidencia pero no creo que tenga tanta seguridad en su puesto como se le supone, tiene el Senado y la Cámara, pero ambos están formado por políticos, los mismos políticos que ha criticado durante su campaña y que él quiere cambiar y los mismos que están comprometidos con infinidad de… digamos «compromisos financieros paralelos con sus labores políticas…» Trump no se puede fiar de la izquierda ni de su derecha tampoco, la derecha son sus enemigos en el momento que les toquen el bolsillo y la izquierda también, EXACTAMENTE por las mismas razones.
Muchos se preguntan porque en gran parte, el pueblo americano a basado su voto en consecuencia a la emigración en su país: Me refiero ahora la las declaraciones de uno de los activista en la manifestación de NY, un varón que fue interrogado por el corresponsal de la cadena y que le pregunta; sobre cuáles eran sus sentimientos en referencia la elección del nuevo presidente y el sujeto en cuestión, que era musulmán (por sus propia confesión), con serias dificultades para expresarse en inglés y que tiene sus orígenes un países que mantienen un religión que insta a aniquilar a todo americano y tiene la cara dura de criticar el propio régimen que le permite protestar… ¿Cómo quiere que se sienta cualquier americano que tiene un pariente o amigo en Afganistán o Siria? o ¿Cualquier americano que estuviera cerca?, no podría evitar decirle, que si no le gusta ¿Qué demonio hace que no se marcha?, pero nadie los dice. ¿Por qué? ¿Hay que dejar que el invitado critique la casa donde come?, ¿Es eso «políticamente» correcto?
Otra crítica a sus declaraciones en la campaña, son de discursos «populistas». ¿A caso los discursos de Hilary, de Sánchez, de Pabletin no son populista?. Todos dicen lo mismo, cambiar el Estatus Quo, salir del círculo vicioso. La diferencia está en decirlo de un lado u otro de la valla y solo se puede estar de un lado al mismo tiempo, si se critican los políticos como «casta» se es populista, como los podemitas, que critican la política pero lo primero es calentar el sillón y escupir en la mesa… pero seguir chupando del bote. El americano como el francés como el español, estamos cansados de políticos que solo se preocupan de sus sillones (y para ejemplo los de podemos o el PSOE), estamos cansado de oír siempre lo mismo, estamos cansados de que los políticos no sepan cuadrar las cuentas y la única solución siempre sea la misma, que paguemos nosotros, de puertas giratorias, de cara duras que pasan por los gobiernos para asegurarse el futuro de forma ignominiosa, que tomen decisiones que nos afectan negativamente a nosotros pero no a ellos, el americano ha dado un paso adelante, lo hizo cuando se negó a pagar el impuesto del Té y lo ha vuelto hacer ahora, solo falta ver si funciona.
Cundo el Partido Demócrata crítica a los poderosos (especialmente los Clinton), parece olvidarse que ellos son multimillonarios y no tienen ni una sola hora del día, dedicada a trabajar en una empresa propia con empleados propios y productos propios. Creadores de «negocios» sin ánimo de lucro, como el dedicado a recuperación de Haití. Trump ha usado su propio avión para moverse y en su primera visita a la Casa Blanca, ha llegado con su propio helicóptero, no es un vagabundo ni un pincha leyes que llega sin nada y después de ser Presidente saca 3000 millones de dólares dando discursos a empresas del «ámbito».
Pero lo más que me llama la atención es la falta de originalidad y de veracidad de muchos (en este caso del periódico The Guardian de UK).
Durante el programa de CNN, donde se seguían los resultados de las votaciones, estaba presente un americano de color, que estaba punto de llorar (no es una exageración es real), el hombre no podía entender cómo era posible que Hilary Clinton estuviera perdiendo y en la magnitud que lo hacía, e hizo una pregunta al viento, ¿Cómo le voy a explicar a mi hija, que ha ganado un…? A lo que continuaba con una ristra de acusaciones, de descréditos, no falto de difamaciones en muchos casos. Un táctica típica para hacer de algo legítimo un problema sentimental, incluso inmoral.
Pues desde ese «reality show» tan oportunista, han salido un montón de madres y padres que tiene el mismo problema y que son tan pocos prudentes y estúpidos que lo sacan en los medios e incluso en los periódicos, esta es mi respuesta para uno de ellos, pero es de talla única para el resto.
En concreto me refiero al El Diario.es en su artículo de: Jessica Valenti – theguardian:
Cómo le digo a mi hija que EEUU eligió a un presidente racista y sexista?
Lo importante en este caso, no es lo que se le dice «después» pero lo que se le dijo «antes». Si a los hijos les decimos que los presidentes, que la política son como los regalos de reyes, que podemos prometer y prometemos… pues tendrán que atenerse a las consecuencias, pero si queremos preparar a nuestros hijos para que sean verdaderos demócratas, los hijos deben saber que hay una mayoría que no siempre satisface a todos, de hecho nunca satisface a todos. Quizás en el caso de los niños, sería más prudente preguntarles antes, que pasaría si no fuera elegidas sus preferencias y educarlos a ser democráticos en lugar de buscar un pañuelo al día siguiente. Eso se llama ser padres y educar a nuestros hijos con valores cívicos y éticos, formarlos para ser verdaderos ciudadanos.
Claro si como en este caso, le ha lavado el cerebro a la hija, con una demagogia del más puro estilo izquierdista, la estaba preparando para un gobierno que no es el democrático donde viven, mejor sería que enviará a su hija a Cuba o países comunista o populistas, donde se conocen con tiempo los resultados y no hay sorpresa. Estados Unidos es soberano y ha decidido democráticamente quién será su presidente y si no te gusta siempre tiene la opción de irte donde más te guste o pienses que te gusta y si no, los mejor es callarte la boca y no perjudicar a tus hijos.
No me extraña que gentes votaran en UK, salir del EU, porque «pensaban que no iban a salir», ese es el sentido y la lógica de gente estúpida que ni votar saben. (Por cierto era del Labor Party).
La izquierda; que se le llena la boca de predicar libertad, igualdad (lo de legalidad procuran no decirlo mucho, por lo que les toca), pero cuando llega el momento que verdaderamente deben apoyarla, entonces eso se olvida, no es justo, no es democrático. Si el discursante no es de su casta, entonces no tiene derecho a la palabra, se forman las broncas, se lanzan los insultos, se saca la violencia, la razón por la fuerza, el derecho por el número, el orden se pierde, la razón se niega, la lógica desaparece y solo queda el derecho de ellos.
Es el privilegio del niño pijo, del hijo único y mimado, del impotente que se siente alguien entre las masas, en el anonimato y el político de izquierda se divierte y en alguna que otra oportunidad los micrófonos abierto permiten conocer la verdad cuando se le oye decir «¡Gilipoyas!»
Pero mientras sean vociferantes e incongruentes jóvenes, que ríen y forman juerga durante las manifestaciones, mientras en su rostro no se vea el miedo, la preocupación, el desasosiego, es señal de que estamos en un país libre, donde el proceso de madurez es largo pero ancho, muy ancho, para ser libre de ir de un lado al otro.
Pues a llorar y a crujir los dientes… para eso somos libres.