El Ministerio de Cultura ha presentado ciento cincuenta medidas para incentivar y desarrollar la Cultura, lo que ha denominado Plan Cultura 2020, que entre otros puntos se abordará la Ley del Mecenazgo, impulsar la Filmoteca Nacional, la lucha antipiratería, plan de fomento de la lectura, el tema del IVA, el estatuto del creador, sobre las pensiones de jubilación y los creadores, ley reguladora del Museo Arqueológico Nacional, libro blanco de la Creación cultural, etc.
1. Como articulista y como persona, que modestamente se ha ocupado y preocupado toda su existencia de la cultura, en diversos ámbitos, creo, que es mi obligación dar mi pequeño parecer. Pero como articulista también tengo que indicar, que no he leído todas y cada una de las medidas, que dicho plan intenta actualizar y concretizar y materializar, pero que quizás, algo de lo que sugiero, si no está en dicho informe podría o debería, perfeccionándose o matizándose y estudiándose quizás incorporarse, a todas las medidas de este plan:
– Parto del hecho que hoy la Cultura, tiene una conformación de Industria Cultural, por lo cual, tiene un elemento esencial, en el PNB del país, de cada territorio, y por consecuencia, es creadora de riqueza, y por consecuencia de trabajo y de empleo y de turismo. Por lo cual, no es un elemento decorativo más, sino que es un elemento esencial, en la industria de una sociedad o país o Estado.
Lo cual nos debe llevar a incorporar al estudio-análisis, más científico y empírico, de dichas cuestiones, expresado en la multitud de áreas y materias y concreciones dónde se inserta dicha realidad-actividad, o en todas las múltiples manifestaciones en que se cristaliza-materializa.
– Personalmente, creo que un factor esencial en la cultura, en la creación cultural, en la industria cultural, son todos los oficios y profesiones de la cultura (ciencias, artes, filosofía, teología, artesanías, etc.), y todas las personas, que en los distintas actividades se dedican a ello.
En segundo lugar, creo, que igual que un botánico o un biólogo o un etólogo si quiere estudiar un nicho ecológico tiene que analizar-estudiar-conocer cuántos tipos de animales y plantas existen, sus interrelaciones con el clima y el suelo y multitud de otros factores. Pero lo esencial, es saber cuántas especies de animales y plantas existen y sus interrelaciones y sus cantidades y sus tantos por cientos de individuos. Y sin esto no se puede hacer nada…
Creo que en la Cultura hay que hacer lo mismo, hay que saber y conocer, cuántas personas, en cada uno de los oficios y profesiones y actividades culturales existen, en el territorio nacional, en cada territorio regional, en cada territorio provincial, en cada territorio local.
O dicho de otro modo, en tal región cuántas personas se dedican a la poesía, al teatro, a la novela, a la pintura, a las docenas de actividades artísticas…
Esencial para ello, es permitir incluir en dicho catálogo de oficios y de profesiones, a todas las personas, no ser un catálogo restringido, sino abierto
– Segundo paso, crear centros documentales online o virtuales, a distinto nivel territorial (nacional, regional, provincial, local), dónde se incluyan todos y cada uno de esos oficios o profesiones. Que toda persona que se dedica a una actividad, sea ella misma considerada muy importante, sea menos, empiece en esos oficios o lleven toda la vida en ellos, haya tenido mucho éxito o mucha aceptación o hayan tenido poca, puedan estar su curriculum y sus datos, si ellos desean, algo de su actividad, sea en forma de fotografía o sea en forma de escritura, etc.
Esto es esencial, porque esto sería como el biólogo al estudiar un nicho ecológico, estudiaría y analizaría todos los individuos de todas y cada una de las especies…
Pero esto daría un cambio de perspectiva. Es intentar, al estar todos, todos los que se dedican a una actividad, con un curriculum, y con una muestra suficiente, virtual o fotografía o de texto escrito, de su actividad, que el individuo quiera diríamos exponer en ese Centro Documental Virtual sobre esa Actividad Cultural Concreta, por ejemplo, de poesía o de artes plásticas o de teatro o de matemáticas o del tema que sea… Esto supondría un cambio esencial y fundamental de perspectiva y de dimensión de las actividades culturales. Ya estarían en tal lugar o centro virtual, cientos o miles o docenas de miles de personas, que se dedican a tal actividad, sea a nivel local o regional o nacional. Por lo cual, los ojeadores o las personas de los diversos oficios de la gestión cultural, ya tendrían un lugar dónde ir a buscar nuevos autores, nuevas obras, nuevas tendencias, a realizar estudios, antologías, etc.
Se cambiaría la perspectiva actual, en la cual un autor equis, que se dedica a la actividad zeta, tiene que ir, enviar su trabajo a cientos de entidades o personas de dicha actividad. Además estarían representados todos los que quisiesen, se fuese anciano o joven, se fuese mujer o se fuese hombre…
Se crea un cambio de perspectiva-dimensión-proyección-interrelación… Al estar ahí, todo o casi todo, nombres y curriculum, parte de las obras… todos los demás oficios que se dedican a la gestión, crítica, análisis, difusión, tienen un lugar dónde ir, y si por ejemplo, van buscando una antología de poesía, pues tendrían todos los nombres que se dedican a estas faenas, sean más conocidos o menos, que existen en tal territorio. Pueden estudiarlos, pueden analizarlos, pueden seleccionar de forma correcta para realizar-construir una antología sea de poesía, sea una exposición de artes plásticas, sea del tema que sea…
– La industria cultural y la cultura, como cualquier otra actividad, las lenguas, los Estados, las diversas entidades territoriales compiten unas con otras. Y además de ser un elemento esencial del PNB, hay que buscar las formas y maneras y metodologías de ser lo más competitivo posibles. Para serlo, primero hay que conocer todo lo que se produce.
O dicho de otro modo, hay que cambiar la óptica y perspectiva de la realidad cultural. No continuar como hasta ahora, que un pintor o un poeta o un escritor, si quiere dar a conocer su obra, tiene que enviar su manuscrito a cientos de editoriales, a cientos de revistas, a veces, a docenas de concursos, o incluso autopublicarse su obra, y después enviar a docenas de críticos, de directores de revistas, etc., dependiendo de la actividad cultural concreta…
Si cambiamos la perspectiva, y todos los autores de una actividad equis, están en un archivo concreto, o todos los que ellos o ellas quieren estar, con su curriculum, y con algo de su actividad, sea la que sea esa actividad, desde traductores, hasta gestores culturales, hasta directores de galerías, marchantes, críticos, traductores, etc. Y por supuesto poetas, novelistas, actores, artistas plásticos, investigadores en matemáticas y todas las artes, ciencias, filosofía, teología, etc.
Si se encuentra en un sitio, por actividades o ramas, todos los nombres, de todos y cada uno de los oficios y profesiones. La persona que quiera realizar un trabajo de investigación, sea académica, universitaria, sea seleccionar o gestionar o encontrar nuevos nombres y nuevas obras, puede ir a ese lugar, dónde se encontrará cientos o miles, e ir seleccionando según los propios criterios, necesidades, fines, estéticas, metas, intereses…
Es decir, la industria cultural se racionalizaría, y por tanto sería más eficiente, por lo cual, se reducirían costes, para los autores, para las empresas gestoras en cada una de las actividades, se recogería más y mejor todo lo existente, habría más posibilidades de que no se perdiese un pequeño diamante a medio perfeccionar o desarrollar… Y por consecuencia, sería dicha sociedad-país-Estado más competitivo en dicha materia de la actividad cultural…
2. Para terminar, creo que crear Centros Documentales o Archivos Documentales Virtuales, de todas y cada una de las actividades culturales, a nivel provincial, regional, nacional tendría un coste mínimo en todas las actividades culturales, podrían ser creados o incentivados por diversas entidades culturales ya existentes, desde museos, fundaciones, departamentos universitarios, revistas, industrias concretas, bibliotecas regionales o nacionales o provinciales, etc. Y creo que sería una forma eficiente, económica, de recoger todo tipos de informaciones, materiales, documentación, datos, información, que después podría ser reinterpretada y utilizada por la industria cultural, los distintos tipos y concreciones y materializaciones…
Para resumir un autor equis, conocido o desconocido, en una actividad zeta, enviaría su curriculum, algo de su actividad productiva, y estaría en ese lugar virtual, y los gestores de la industria cultural, de esa actividad, tendrían que ir, cuando ellos lo deseen, estudiosos e investigadores, a estudiar y analizar, obras y nombres, para sus fines concretos… Creo que se reducirían los costes para todos, sería un sistema y una metodología del aprovechamiento de la industria cultural más eficiente, a y en todos los niveles, y sería un modo más eficiente de que todas las obras y todos los autores, pudiesen tener un lugar, más posibilidades de que no se pierda y desde luego, cabría muchas posibilidades, desde crear archivos documentales, en todas las actividades culturales, a nivel local, provincial, regional, nacional…
Solo queda como siempre, que esta sugerencia, que tantos lustros llevo exponiendo, de una manera u otra, pudiese ser recogida en este Plan Cultura 2020 o sea recogido por cualquiera de las entidades existentes en el tapiz cultural de nuestra sociedad-país-Estado. Pero piensen ustedes, el ministerio de industria y distintos departamentos regionales y nacionales, saben y conocen, cuántas panaderías existen en un territorio, conoce alguien cuántos poetas o artistas plásticos o matemáticos o filósofos existen en ese mismo territorio…
Piensen, que nuestro país-sociedad-estado, con una industria cultural enorme, no exista vivo y nacido en el país, que yo conozca, ningún Premio Nobel, no será, una clara evidencia, que la industria cultural, no está gestionada de forma correcta, organizada de forma correcta. Y un elemento esencial en ello, es conocer los autores y sus obras, hayan sido editadas o no, sean muy importantes o muy poco…
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