Julia Navarro

El arte de mentir

El arte de mentir
Julia Navarro.

Es una realidad que la primera víctima de todos los conflictos es la verdad. Y yo diría que en los últimos años aún más desde que vivimos instalados en la «postverdad» que no es otra cosa que la mentira. Pero sobre todo en las conflictos modernos las batallas también se ganan con la propaganda, aunque sea una propaganda trufada de mentiras.

Precisamente en el conflicto catalán las mentiras están alcanzando naturaleza de realidad. Está todo estudiado, basta con repetir una mentira cientos de veces. Los independentistas catalanes no tienen ningún empacho en tergiversar y reinventar la Historia, llevan años haciéndolo y tampoco lo tienen a la hora de presentarse como víctimas del Estado cuando resulta que suya es la responsabilidad de decretar que en Cataluña ya no rige ni su Estatuto ni la Constitución.

Eso sí, hay que reconocerles que en el capítulo de la propaganda le dan sopas con ondas al Estado, o mejor dicho al Gobierno Rajoy. Uno de los últimos capítulos que ilustran lo que digo es el vídeo de Omnium. Verán, no tengo un sentido conspirativo de la Historia pero he vivido lo suficiente, y sobre todo he estado durante muchos años en primera fila haciendo crónica política y sé que la mayoría de las cosas no pasan por «casualidad». Por eso ayer me alarmé al ver el video editado por Omnium en el que una joven hablando un impecable inglés presentaba ante el mundo a España como un país siniestro que ahoga las libertades de los buenos catalanes a los que se reprime con violencia por su afán de libertad y democracia. El gesto contrito de la joven, el tono de voz cargado de angustia, la puesta en escena del vídeo con imágenes violentas… De repente me di cuenta de que ya había visto ese vídeo antes, pero con otra protagonista.

Sí, lo había visto años atrás cuando las manifestaciones del Maidan, cuando el gobierno ucraniano, que había ganado las elecciones, decidió inclinar sus preferencias por Moscú en vez de por la Unión Europea, y entonces se desató el infierno.

Manifestaciones reprimidas, sentadas en la plaza del Maidan, los países europeos alineándose con los manifestantes y apoyando el la rebelión contra el gobierno de Ucrania… Entonces lo que allí se jugaba era una partida entre Rusia y Occidente. Por intereses económicos claro está. Y los ucranianos fueron utilizados en esa partida.

En aquellos días alguien financió un video que se pudo ver en todo el mundo en el que una chica que se presentaba como ucraniana describía el horror de la situación, la represión del gobierno de su país y pedía ayuda, ayuda internacional.

Al ver el video de Omnium, que es un calco del ucraniano me pregunto si hay algo y alguien más detrás de lo que está pasando en Cataluña.

Lo cierto es que la Generalitat y sus socios llevan ventaja en cuanto a propaganda se refiere. Son unos auténticos maestros de la manipulación y la postverdad.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído