¿Se necesita un gobierno de salvación constitucional y nacional y regional?
¿Aunque en un proceso posterior, se pueda en paz y de mutuo acuerdo, reformar algunos puntos de la Constitución?
Aunque no sirva para nada, ni para nadie, quizás habría que reflexionar sobre algunos aspectos:
– ¿La clase intelectual de la Península, una gran parte de ella, especialmente, el profesorado universitario de ciencias sociales, humanidades, filosofía, y conexos, ante el enorme reto que llevamos soportando durante estos lustros, se ha callado y silenciado voluntariamente, y ellos y ellas que podrían dar luz, se mantienen en una postura expectante? ¿Estas personas especializadas en sus diversas actividades y especialidades han optado por el silencio?
¿La clase intelectual en la Piel de Toro, o no existe, o ha querido estar en silencio, ellos y ellas, que saben suficiente sobre la realidad…? ¿Cosa que extraña que en cualquiera de los otros problemas, siempre estaban los primeros, y ahora, que los necesitamos, que nos den luz y conocimientos y sabiduría y expectativas, y nos expliquen algo del pasado y del futuro y del presente, salvo excepciones, están en el silencio…?
¿La clase intelectual en sentido amplio, no solo profesorado universitario, sino profesionales liberales de todos los oficios, el estamento eclesiástico y sus directivas éticos morales, parte de los profesionales de los medios de comunicación…?
– Es demasiado que un individuo, después de la segunda guerra mundial, en Europa, en un país-sociedad-Estado democrática, que un individuo en su corta vida, tenga que soportar, a distancia de casi cuatro décadas, dos golpes de Estado, uno en su juventud, otro, en la última fase de la madurez. (Sin olvidar décadas de terror, sin obviar una guerra fría nuclear pendiendo sobre su cabeza…).
– Me pregunto, por qué, ahora, los secesionismos han tomado fuerza y enorme velocidad, me pregunto, incluso si querrían este fin, por qué no han ido obteniendo poco a poco, esa meta, por negociaciones sucesivas. Es decir, el mismo procedimiento que han ido utilizando y obteniendo, y que les ha dado tan buenos resultados en estos lustros. El famoso gradualismo.
¿Qué ha sucedido para ese incremento de velocidad y fuerza, para conseguir ese fin-meta ahora, y no seguir esperando, consiguiendo nuevas esferas de poder?
– Si la Península Ibérica se divide en diez o quince o veinte años, en cuatro o cinco Estados. Es volver a la Edad Media. Porque tendríamos cuatro o cinco ejércitos en dicho territorio limitado, cinco Jefaturas de Estado, cinco Parlamentos, etc. Estemos dentro y fuera de Europa, o cómo estemos dentro de Europa.
Más cuándo los nuevos Estados que surgirían, nacerían con la voluntad de ampliar territorios, es decir, sus regiones-Estados iniciales ampliarse. ¿Un imperialismo regional? Lo cual, nos pondría en un panorama, de enorme vulnerabilidad e incertidumbre, frente a nosotros y frente al mundo, incluido el Mediterráneo y los intereses de las potencias de otras zonas del mundo, próximas y lejanas a nosotros.
Existiría una enorme posibilidad de balcanización, existiría una enorme posibilidad de volver a la Edad Media, cuándo existían varios Reinos y Taifas en dicho territorio.
¿Hemos caído en la Piel de Toro en una locura colectiva, alguien en su sano juicio se secciona dos dedos de una mano, y se queda solo con tres, libre y voluntariamente…?
– Si en las próximas elecciones regionales, todos los secesionistas se ponen de acuerdo, en una «candidatura», o varios van en una candidatura, y otros no se presentan, pero «todos votan a esa candidatura, y esa candidatura, lo presentan como referéndum o plebiscito». ¿Qué sucedería…? ¿Con el actual sistema D´Hont, puede que obtuviesen menos votos, que eso habría que verlo, pero obtendrían más escaños como cosa que ya ha sucedido…?
¿En cambio los partidos constitucionalistas, en el marco regional, posiblemente, ni irían juntos en una lista, ni ninguno dejaría de presentarse y ninguno votaría a los que se asociasen en una hipotética lista única?
¿Por lo cual, podría suceder, que los organizaciones constitucionalistas, al ir, en tres formaciones diferentes, podrían obtener más votos, pero obtener menos parlamentarios regionalistas? ¿Tendríamos la misma situación de hace unas semanas…?
¿Pero además ahora, habría habido unas elecciones «legales a autonomía», pero que el bloque no constitucionalista las habría presentado como «referéndum de secesión» y, o «como plebiscito para cortes constituyentes de esa secesión» o, y de «referendo de la secesión ya producida, según los acontecimientos de semanas y meses anteriores»?
– ¿Se plantea un «gobierno constitucionalista de salvación nacional», y por consecuencia, un «gobierno regional de salvación nacional», es decir, de la Constitución? ¿Aunque esta posteriormente se pueda y se deba reformar…?
¿Es obvio, que igual con la República tantos partidos nacionales, además de los regionales, hacen imposible la gobernabilidad de la sociedad-Estado?
¿Hemos caído en el mismo problema, es decir, la enorme complicación de la gobernación de la sociedad, por parte del Estado…? ¿Por lo cual, estamos a punto de igual, que la República fracasó, la democracia parlamentaria actual, esté al borde del abismo y al borde del fracaso…? ¿Por lo cual, hay que tomar medidas, de que los partidos-fuerzas y sectores de la sociedad constitucionalistas, adopten medidas de salvación constitucional del Estado, según la ley y la Constitución…? ¿A nivel nacional-estatal, a nivel regional…?
– ¿Tendrán el valor que los tres partidos nacionales constitucionalistas, como excepción, ir a nivel regional, en una sola lista? ¿Serán capaces, para salvar la Constitución, aunque posteriormente se abra un tiempo de reforma, en paz y de mutuo acuerdo, según procedimientos de la misma Constitución?
¿Y si los tres partidos nacionales, no son capaces en una región equis, ir unidos en una lista, por la famosa ley D´Hont, que no les vuelva a suceder lo mismo, tener más votos, pero menos parlamentarios regionalistas…? ¿No están abocados a que la misma postura se repita, incluso aunque voten más personas, de un lado y de otro en las próximas elecciones regionales de dentro de unas semanas…? ¿O incluso, qué sucederá si pierden en escaños, y también en votos…?
– Hay quién piensa, que este golpe de Estado que se ha ido produciendo en fases y en etapas, y que ya se ha consumado, concepto del señor Guerra, hay quién piensa que este es el embate que la sociedad española, es el más grave y dramático que ha soportado en esta fase de la democracia, hay quién piensa que es más grave que el de 1981, y más grave que otros acontecimientos sucedidos…
Pero lo peor de todo, es que «en este juego, nadie gana, todo el mundo pierde», ya, ahora, ya mismo, todos estamos perdiendo, pero aún podemos perder más. Y más es más.
Me siento incapacitado para encontrar más argumentos y más razones, para que nos demos cuenta, que juntos podremos tener un futuro posible y limitado, ya que somos un Estado de tamaño medio, separados, seríamos tres o cuatro Estados de tamaño pequeño. Estemos dentro o, y fuera de Europa, o Europa sea o exista como exista. Por lo cual, surgen en el panorama multitud de variables de incertidumbre y vulnerabilidad.
Juntos todos, podemos defender, cada uno mejor, sus pequeñas diferencias, pero separados, cada uno se enfrenta al futuro con sus «solas fuerzas».
¿Si nosotros, ninguna región gana con esta situación de secesión, bien haríamos todos en preguntarnos, quién ganaría o ganará, a corto y medio plazo de tiempo…? ¿Si ni los de una región, ni los de otra, ganan, y todos pierden, y todos perderán y todos perderemos, quiénes son los que ganan, dentro y fuera de la Piel de Toro…?
¡¿Por qué hermanos catalanes, hermanos vascos, hermanos gallegos, hermanos castellanos, hermanos todos, por qué no reflexionamos seriamente sobre esta cuestión…? ¿Si todos, perderemos un ojo o una pierna o un brazo o una mano o un pie…, por qué nos hemos metido o nos han metido en este tinglado, quién y qué gana ahora, y quién y qué ganará en el futuro, y qué busca y qué buscan…? ¡Paz y bien!
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