Análisis

Titulaciones y política

Titulaciones y política
Jesús Millán Muñoz. PD

Independientemente de la actual polémica nacional sobre títulos y master, ya en este medio periodístico, en algunos artículos he ido indicando lo que a mi parecer, se debe exigir a un alto cargo de la representación política, al menos en los altos niveles de la representación nacional o regional, o diputaciones o consistorios o municipios de un nivel demográfico importante.

Bajo mi modesto entender y comprender, creo que la representación política, tiene que tener unas mínimas exigencias para los altos cargos y cargas, es decir, bajo mi punto de vista, no es suficiente, ser elegido por un partido político, y tampoco después ser elegido en las urnas.

Sino que tiene que tener unas condiciones mínimas.

La primera, igual que nadie vería con buenos ojos, que una persona, terminada su carrera, y con poca experiencia, por los vericuetos de la existencia acabase siendo el director hospitalario de un centro médico de quinientas camas. Creo que en la representación política, tendría que haber una escala de años, porque esto, no solo muestra y demuestra, experiencia política, sino también experiencia vital.

La actividad política exige tomar decisiones, muy graves y leves que afectan a docenas de miles, cientos de miles o millones de personas, según sea la representación política.

Por lo cual, a mi modo de ver, un alto cargo, salvo alguna excepción, sea en el Parlamento Nacional o Regional, un ministro nacional, un consejero de cualquier región, un alcalde de una ciudad de un determinado número de habitantes, etc. No tendría que tener menos de cuarenta años. Puede existir alguna excepción, que se podría enmarcar en un estudio más serio. Esto es un boceto.

A mi modo de ver, esto es un tema, que no se ha estudiado o abordado lo suficiente, por lo cual, creo que es de absoluta necesidad, que se abra un paréntesis de diálogo, análisis, estudio a y en todos los sentidos, por los medios de comunicación, y por las fuerzas sociopolíticas de la sociedad y del país.

La segunda, una persona que va a regentar durante unos años, muchos o pocos, un cargo y carga de representación política, en los casos anteriores, al menos que hemos indicado, además de la edad, se le debe exigir una titulación superior, sea la que sea.

Creo que es lo menos que se puede pedir, puede existir alguna excepción, que se debería fijar.

Ante la polémica actual, que barre los vientos de la Península, creo que como medida, que se podría imponer, igual que se exige la entrega de las declaraciones de la renta y de bienes, sería exigible, que se entregase, compulsada, las titulaciones y estudios, antes de presentarse a una representación política de alto nivel (Parlamento Nacional, Parlamentos regionales, ministros, consejeros regionales, alcaldes y concejales, etc.).

Y, desde luego, cuando vayan a recoger el acta de representación, entregar una copia de la titulación adquirida, compulsada.

Creo que los cargos políticos, altos o bajos, tienen una enorme responsabilidad, no todo se puede dejar en manos de los asesores, si conocen y saben, pueden sugerir nuevas ideas, nuevas formas de solucionar un problema, es absolutamente necesario la eficiencia y la racionalidad y el saber. Y por muchos asesores que se tengan, tendrán que seleccionar una solución u opción entre varias posibles…

Esta medida de entrega compulsada de las titulaciones a todos los cargos del país, puede realizarse voluntariamente, se debería ser efectiva para la siguiente legislatura, sea a nivel nacional, regional, sea en las próximas elecciones nacionales, regionales, europeas, municipales, los cargos políticos de las diputaciones. Podrían y deberían estar escaneadas al lado de las titulaciones que en las webs oficiales de los distintas entidades políticas suelen estar y tener y disponer…

Tercero, creo que tiene que existir una escala de responsabilidades políticas. O dicho de otro modo, en todos los oficios y profesiones, se va ascendiendo de una escala menor a mayor, incluso en las empresas en que los propietarios son los padres, y heredan los hijos, hemos visto algunos casos en la banca española, los vástagos, van pasando en las empresas familiares o extrafamiliares, van sucediendo y ascendiendo, además de tener los estudios pertinentes, van pasando por responsabilidades menores, hasta ir ascendiendo a cargos y cargas superiores o máximas, pasando entre medias por una edad…

Creo que esto también debería estar regulado, sería a mi entender, la tercera gran condición, que alguien, antes de ser y tener y estar en un alto cargo, obligatorio tener una experiencia política previa. O dicho de otro modo haber pasado por pasos intermedios de representación política, que haya tenido acceso a dineros públicos, responsabilidades políticas, que hayan exigido haber tenido que tomar opciones económicas y políticas, de mayor o menor responsabilidad… si la empresa privada funciona, es porque esta condición se cumple generalmente en el mundo, si las religiones están durante siglos, es porque se cumple esta condición, si el ejército, se mantiene es porque también se cumple este factor…

Para terminar y no cansar más, creo que se necesitaría y se exigiría, fijar por decreto unas condiciones de y para la representación política, cierto que antes la sociedad debería analizar y estudiar, «que la carrera política exige un mínimo de elementos». Porque de las decisiones que tomen y ejecuten y legislen, miles de personas, dependen en mayor o menor grado y, que las actuales generaciones puedan vivir y existir y también las futuras. Por lo cual, si a toda persona que va a ejercer un oficio o profesión, se le exige una serie de condiciones, creo que en los cargos políticos también. Porque de sus decisiones dependemos los demás, en muchos sentidos y formas y maneras…

Aquí he situado tres condiciones, pero podrían fijarse y matizarse algunas más, pero desde luego, después de estudiarse y analizarse y argumentarse dicho problema, se deben reglamentar. Creo que es absolutamente necesario hacerlo… No solo se debe exigir, que sean elegidos por sus fuerzas y partidos políticos, ni solamente por el consenso popular en las votaciones, sino que se deben exigir, al menos, entre otras estas tres grandes condiciones: para cada nivel de representación política: una titulación mínima, según el cargo de representación, demostrada fehacientemente, segundo, unos años de experiencia en la carrera política, pasando por distintos niveles de responsabilidad, tercero, unos años de vida, una edad en ese representante, dependiendo del cargo y la carga.

Si esto se cumpliese, creo que salvando excepciones, que pueden ser fijadas, no habríamos visto el espectáculo político que hemos padecido la humanidad en estos últimos cien años en Europa y en el mundo, y creo que no se habrían caído en errores tan graves, porque al final, faltaba experiencia política previa, años de existencia y de experiencia mínima vital y desde luego saber con titulaciones acordes al grado de responsabilidad. Poner ejemplos, es innecesario piensen ustedes en el presente y en el pasado…

https://plus.google.com/118354057109613604628 © jmm caminero (12 abril-04 mayo 2018 cr).

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