Precampaña del 4-M.
El entonces candidato del PSOE para presidir la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, durante el fin de semana del 9-11 de abril de 2021, aprovecha un mitin para soltar que en la región el riesgo de morir por Covid era superior en un 54% al del resto de España.
Preguntada por estas declaraciones, máxime cuando el político socialista estaba abonando en realidad su camino para irse de Defensor del Pueblo, Isabel Díaz Ayuso, entonces presidenta en funciones, respondió con claridad:
Este señor, que ni quería ser candidato, que ya estaba recogiendo sus cosas para irse a ser Defensor del Pueblo, ahora está atacando a Madrid con falsedades. Cuando pierda las elecciones, de ahí se va a su casa. Si de mí depende, no va a ser Defensor del Pueblo. Una persona que es capaz de decir que la gente en Madrid se muere más no está preparad para eso. Además, él, que siempre ha ido de moderado.
Pues bien, al final el PP de Pablo Casado se ha dejado engatusar por el PSOE de Pedro Sánchez y ha pactado la renovación de varios órganos, entre ellos el del Defensor del Pueblo.
¿Y saben quién era el propupuesto por los socialistas y que ha contado finalmente con el beneplácito del líder de Génova 13? Efectivamente, Ángel Gabilondo.
De ahí que este 22 de octubre de 2021 el periodista Federico Jiménez Losantos muestre su faceta más endemoniada contra la tración que ha sufrido, una vez más, Ayuso por parte de su propia formación.
Así lo detalla en su tribuna de El Mundo donde, aparte de a Casado, le mete a su segundo, Teodoro García Egea:
Cuando la política golpista en cómodos plazos del Gobierno Sánchez revienta las costuras de la independencia del Poder Judicial, llega Pablo Casado con el humeante pastel del reparto político de las instituciones, a medias con Sánchez, que las revienta desde la Fiscalía. Ayer, para desdecirse de sus propias palabras y darle una torta a Ayuso, hizo defensor del pueblo a Ángel Gabilondo, cuya campaña contra el PP en Madrid fue tan ruin que Ayuso le dijo que si de ella dependiera jamás sería defensor del pueblo.
Losantos recuerda lo obvio al Partido Popular, al menos a esos dirigentes con demasiada prisa en ir a socorrer al PSOE:
¡Qué más querían Zipi y Zape que otra oportunidad para atacar a la figura más popular de su partido! Se supone que el Defensor del Pueblo debe ser una figura no partidista o que no se haya significado sectariamente contra otros partidos. Que Casado no participó en la campaña de Madrid que ahora se apropia se nota en que no recuerda la ruindad de Gabilondo. Pero como Ayuso dijo que ella nunca lo nombraría, cátalo Defensor. Será de medio pueblo, del de Jorge Javier y Rocío Carrasco, no el del medio pueblo que votó al PP. Pero como le gustaba a la izquierda y le disgustaba a Ayuso, Teodoro se rindió ante Bolaños. Ángel Gabilondo, huelga decirlo, no es un ángel, sino un Gabilondo, pero por un minuto de favor mediático Maricomplejines mata.