«Y ahora andan en tiquismiquis sobre el lugar en el que puede celebrarse una entrevista pedida por Companys, que no quiere venir a Valencia. (Ahora no le aguarda aquí ninguna ovación.) Negrín asegura que no tendría ningún inconveniente en ir a Barcelona, como ha ido otras veces, pero si Companys hace cuestión de etiqueta o de amor propio no venir aquí, tampoco irá él, ni aceptará que se partan las distancias, reuniéndose en Benicarló. (Lamentablemente.) El Presidente está muy irritado por los incidentes a los que ha dado ocasión el paso de Aguirre por Barcelona. “Aguirre – dice – no puede resistir que se hable de España. En Barcelona afectan no pronunciar siquiera su nombre. Yo no he sido nunca – agrega – lo que llaman españolista ni patriotero. Pero ante estas cosas, me indigno. Y si estas gentes van a descuartizar a España, prefiero a Franco. Con Franco ya nos las entenderíamos nosotros, o nuestros hijos, o quien fuere. Pero esos hombres son inaguantables. Acabarían por dar la razón a Franco. Y mientras, venga a pedir dinero, y más dinero…».
El párrafo anterior pertenece al libro “MEMORIAS POLÍTICAS Y DE GUERRA, II», cuyo autor es MANUEL AZAÑA, publicado en 1978, para España y América, por Editorial Crítica, S.A., con ISBN: 84-7423-049-7 tomo II. Reparto de personajes: AZAÑA (Presidente de la Segunda República), NEGRÍN (Jefe de Gobierno de la Segunda República), COMPANYS (Presidente de la Generalidad de Cataluña), AGUIRRE (Jefe del gobierno vasco en tiempos de la II República.
Existe otra referencia de Manuel Azaña, más de lo mismo y relativa a Felipe V y Barcelona, que por su brutalidad me niego a transcribir.
Por otra parte, el político, periodista y escritor, Julián Zugazogoitia, recogió en uno de sus libros las palabras del que fuera Presidente del Gobierno de la IIª República, el doctor Juan Negrín: «No estoy haciendo la guerra contra Franco para que nos retoñe en Barcelona un separatismo… y pueblerino (…) No hay más que una nación: ¡España! (…) Antes de consentir campañas nacionalistas que nos lleven a desmembraciones que de ningún modo admito, cedería el paso a Franco sin otra condición que la que se desprendiese de alemanes e italianos».
Manuel Azaña, Juan Negrín; dos visiones sobre una misma cuestión. Palabras que han quedado grabadas en la Historia, para reflexión y juicio de las generaciones futuras.