LA VOZ INTERNA QUE NOS AVISA

El sexto sentido, el único que no falla

A nuestro cerebro le llegan diferentes órdenes

El sexto sentido, el único que no falla

Una persona está tomando un café, sentado tranquilamente en la terraza de un bar.

De repente una sensación de peligro inminente lo inquieta. Intenta tranquilizarse pensando que es imposible que nada malo le pueda suceder.

Su mente racional analiza rápidamente el escenario donde se encuentra y le dice que no tiene motivos para intranquilizarse, mientras una voz en su interior le grita que salga de allí lo antes posible.

Tras un breve debate interno entre su inteligencia racional y la misteriosa voz, nuestro el sujeto paga el café y sale corriendo, justo en el momento que la cornisa del edificio cae en el mismo sitio donde se hallaba sentado unos segundos antes.

Aquellos que no creen en nada que no hayan visto en televisión o leído en los periódicos, dirán que lo sucedido fue una mezcla de imaginación y casualidad.

Otros dirán que el alma humana existe y tiene unas facultades que van más allá de lo consagrado por las leyes de la física. Habrá quien hable de una intervención del ángel de la guarda, o de algún santo; y habrá hasta quien como un servidor, hable de una directa intervención divina.

Tenemos una visión tan antropomórfica de Dios, que pensamos en Él como una persona muy importante y ocupada que tiene que recurrir a un ejército de servidores para poder controlarlo todo y poder llegar a todos los sitios, y que necesita una legión de ministros, un ejército de asesores, y una pléyade de palmeros que le aplaudan sin parar.

Personalmente pienso que Dios, por el simple hecho de serlo, no necesita de intermediarios que le ayuden en su cometido; porque de necesitar ayuda, no sería Dios.

Creo en el Dios Padre de Amor que nos mostró Jesucristo, y como hijo de Dios me siento.

Tal vez un poco díscolo y rebelde, pero hijo al fin y al cabo; amado, guiado y protegido, pero siempre libre para actuar a mi antojo.

Si con todos los avisos y mensajes internos que he tenido a lo largo de mi vida, negase lo evidente, no sería más que un estúpido pertinaz… además de un ingrato.

¿Que qué opina la Ciencia? Pues la Ciencia como tal no opina nada, salvo que, ante lo innegable,  el sexto sentido existe y está ahí. Y ante la obviedad de su existencia hay quien ha pretendido ´descubrirlo´ y hasta bautizarlo con el rimbombante nombre de   “propiocepción”, que según ´no sé quién ́, es la capacidad que tiene nuestro cerebro de saber la posición exacta de todas las partes de nuestro cuerpo en cada momento.

Dicho de otra manera, a nuestro cerebro le llegan diferentes órdenes desde las articulaciones y los músculos de la posición exacta de los mismos.

Y digo yo, ¿qué tiene ver esa explicación con esa voz interna que nos avisa de un peligro antes de que suceda, como en el caso de la caída de una cornisa?

Muchas palabras pero ninguna respuesta concreta. Aquí, una vez más, aplico el principio metodológico y filosófico de la navaja de Occam, según el cual «en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla suele ser la correcta. Es decir, que cuando dos teorías en igualdad de condiciones tienen las mismas consecuencias, la teoría más simple tiene más probabilidades de ser la correcta.

Y es más sencillo justificar el sexto sentido como una evidencia del alma y el mundo espiritual,  que decir  que el sexto sentido es consecuencia de que a nuestro cerebro le llegan diferentes órdenes desde las articulaciones y los músculos de la posición exacta de los mismos… ¿Y?

Pues ´guapas´ van a quedar las articulaciones cuando les caiga encima una cornisa de media tonelada.

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Autor

Antonio Gil-Terrón Puchades

Antonio Gil-Terrón Puchades (Valencia 1954), poeta, articulista, y ensayista. En la década de los 90 fue columnista de opinión del diario LEVANTE, el periódico LAS PROVINCIAS, y crítico literario de la revista NIGHT. En 1994 le fue concedido el 1º Premio Nacional de Prensa Escrita “Círculo Ahumada”. Ha sido presidente durante más de diez años de la emisora “Inter Valencia Radio 97.7 FM”, y del grupo multimedia de la revista Economía 3. Tiene publicados ocho libros, y ha colaborado en seis. Actualmente escribe en Periodista Digital.

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