No se trata de la película dirigida por Peter Hyams, aunque tiene cierto parecido, el acoso y derribo al que continuamente esta siendo sometido el exjuez Fernando Presencia, es lo más parecido al mejor thriller americano, una trama de políticos y jueces corruptos que se dedican a ejecutar su propia ley.
El Juez Fernando Presencia es un juez que ha denunciado a la Fiscal General del Estado, Dolores Delgado, por los delitos de fraude fiscal, evasión y blanqueo de capitales, a María Margarita Robles Fernández, Magistrada y ministra, también por fraude fiscal, al fiscal decano de Talavera Ángel Demetrio de la Cruz Andrade por sobornos, al Juez Decano de los Juzgados de Valladolid Emilio Vega González, por los delitos de prevaricación y una larga lista de jueces y políticos que harían tambalear los cimientos de cualquier país democrático.
Pero el periplo del Sr. Fernando Presencia tiene origen según sus propias manifestaciones “cuando consiguió, en plena crisis financiera, que el instituto de la Dación en Pago fuera recogido por primera vez en el ordenamiento jurídico español”.
Desde entonces el ex Juez ha sido perseguido hasta el punto de ser apartado de la judicatura e incluso haber recibido una orden de detención. Además el ex juez y su familia actualmente están siendo desahuciados de su vivienda, victimas de un complot judicial.
Fernando Presencia denuncia a D.Ángel Demetrio de la Cruz Andrade, por haber sido sobornado con 760.000 €; a la secretaria del 4, María Rosa Turnes de la Infanta, por haber sido sobornada con 1.000.000 €, a la jueza también del 4 que pretende mi desahucio ilegal, Almudena Marina Navarro Heredia, por haber sido sobornada con 400.000 € y por ultimo a Vicente de Gregorio ha sido denunciada por recibir 400.000 euros en la oficina principal del CREDIT ANDORRA en diez depósitos.
Nombres y apellidos, así lo hace el exjuez Presencia, no le tiembla el pulso para señalar con precisión a sus excolegas de profesión, y que con gallardía prosigue denunciado desde ACODAP, una asociación con amplia experiencia en la lucha contra la corrupción.
De ser verídico todo lo que señala y denuncia este exjuez, estaríamos ante un caso gravísimo de corrupción judicial que expondría un estado jurídicamente corrupto, carente de los debidos controles y garantías, dejando al ciudadano desprovisto, de una regia protección jurídica, donde cualquiera puede ser víctima de un complot urdido por estos jueces de la ley.
Tal y como expongo en mi artículo: “La bestia oculta tras el uniforme”, no es necesario ver un hombre cabra con cuernos y rabo para tener miedo, saber que se trata del diablo, y que sus intenciones son maléficas. Ahora la bestia se esconde detrás de una toga, descubriendo una forma social perfecta para poder ejercer el mal a sus anchas.
Después de todo lo expuesto, dejaría una pregunta en el aire, ¿es la solución la independencia del poder judicial?, pues tras la señalada organización criminal de todos estos jueces y fiscales, tengo mis propias dudas.
