En una votación telemática con el móvil uno se puede equivocar de tecla por torpeza, error, párkinson; o también por tener los dedos gordos… En el caso del diputado del PP Alberto Casero, ya han sido dos veces, y cualquiera de los supuestos podría valer.
En la primera, su ´error´ permitió con su voto que se aprobara la reforma laboral ´sanchista´, el pasado 3 de febrero, en contra de lo votado por su propio partido y el resto de la oposición.
En el segundo ´error´, Casero votó junto a socialistas, comunistas, e independentistas, a favor de que se abriera una comisión de investigación sobre la responsabilidad del gobierno de Mariano Rajoy (PP) en la llamada ´operación Cataluña´, contra el independentismo… ¡Para mear y no echar gota!
Cabe recordar que Alberto Casero, durante el período de Pablo Casado, del que fue uno de sus ´patas negras´, con despacho propio en ´Génova´.
Pero volviendo al principio de la historia, y puestos a ser mal pensados, viendo que el ´beneficiario´ de los ´errores´ de Casero siempre es el mismo, Pedro Sánchez y su ´comparsa´ (social-comunistas y separatistas), también podríamos pensar que a Casero alguien lo tiene cogido por las criadillas.
Será casualidad que durante este periodo de tiempo, Alberto Casero, esté inmerso en un ´serio´ procedimiento judicial, en el que lógicamente participa la Fiscalía… Recuerdan la historia ¿de quién depende la Fiscalía? ¡Pues eso!
En cuanto a la responsabilidad política frente a su propio partido, por sus ´errores´, el tiempo está demostrando que ´hacer un casero´ es lo mismo que hacer un ´sinpa´. Es decir, irse de rositas sin pagar la cuenta.