Cuando la mentira se hizo carne,
fue bautizada con el propio nombre
de Pedro Sánchez Pérez Castejón;
de estar en forma Fraga Iribarne,
lo máximo que este símil de hombre
habría sido es un retal de cajón
de sastre para un remiendo, caso
de en la Política haber dado un paso;
*
pero a trancas y barrancas y gracias
a un manso Rajoy y a un endeble
Feijóo, hoy es Presidente de España,
que es ya la mayor de sus desgracias;
no habiéndole gustado ningún mueble,
lo primero que ha hecho es, con saña,
para dormir tranquilo de un tirón,
antes que nada, cambiar el colchón;
*
y vaya que le está yendo bien eso,
sin sentir que le aporrean la puerta,
y que le pueden sacar de la cama …
Y tras darle, donde le quepa, un beso,
le pueden abandonar en su huerta,
donde se está amontonando la grama
de la Oposición, en duros y gordos
mazos … Él a lo suyo: ¡oídos sordos!.
*
Pe dro no es la negación tres veces
de la verdad … Perro astuto no cabra,
se toca, gusta, huele, oye y mira;
por dentro y por fuera, se abre a las preces
de quienes le rezan con la palabra,
que se ha hecho carne, de la mentira
convertida en su Himno Nacional,
con letra y música propias, tal cual,
*
en su día, primero el Rey Felón,
después un Zapatero Remendón,
y ahora este Falso Relumbrón:
¡El Pedro Sánchez Pérez-Castejon!
