Su próximo mañana, lo tiene, aunque es ateo, clavado fijo en el seso

¡PUES ESO!

Con los brazos abiertos como un crucifijo...

¡PUES ESO!

Cel cerdo se dice que hasta sus andares,

Del paladar nos excitan el gusto;

Pero del Sánchez no se oye, cuando el busto

Pasea entre los enormes pilares

_*-

De su fama, -sean de sus similares,

O de las enemistades del vetusto

PP, o de VOX-, su vaivén … Y el disgusto

Que coge transciende los montes y mares

-*-

Del Orbe, de uno a otro, tanto adusto

Como a placer, uno a uno, o a pares,

O en grupo, le da al cuerpo los más dispares

-*-

Caprichos … Nada teme si el arbusto

De su lívido pueda darle un susto…

Savia tiene, y más que los olivares

-*-

Aceite … No se da cuenta que el justo

Para cantar coplas por otros lugares,

Lejos de la Moncloa… Pues eso… ¿Robusto

-*-

Se sentirá exhibiendo aún más su augusto

Aspecto … de pijo por míseros bares?

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Autor

Salvador Monzó Romero

Salvador Monzó Romero cuenta la feria según le ha ido y según le va, siempre ante la pantalla de la Televisión, reivindicando desde su sillón-bol, un tanto escorado a la derecha, su derecho a la crítica mordaz y ácida, pero con carácter moralizante.

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