La verdad es que siempre produce alegría ver las calles iluminadas con motivo de las fiestas navideñas.
Pero sinceramente este año produce inquietud y resquemor ver en España como las tradicionales estrellas de Belén, han sido sustituidas por satánicas cruces invertidas con una especie de serpientes enrolladas en ellas, así como islámicas medias lunas con estrella.
Supongo que serán las luces navideñas pactadas por el papa Francisco con doña Rogelia, con arreglo a la liturgia de la Agenda 2030.