Dudas en torno a la continuidad de Gareth Bale en el Real Madrid.
El galés, que apenas ha contado para Zidane en la última parte de la competición de la pasada temporada -incluso se quedó sin ir convocado en el trascendental partido de vuelta de la Champions contra el City- ha roto su silencio desde la concentración de su selección en Sky Sports.
El atacante reconoce que por él se habría ido del Madrid ya el año pasado:
«Intenté irme el año pasado y en el ultimo segundo se rompió todo y no se materializó. Es una pregunta para el club, quiero jugar al fútbol, yo no lo puedo controlar, tengo un contrato»
Y es que fue el propio Zidane quién le abrió la puerta de salida en el verano de 2019 cuando reconoció que «cuanto antes se fuera, mejor». Sin embargo, y siempre según la versión de Bale, el club no estaba por la labor de dejarle salir o al menos, se entiende, de malvenderle, habida cuenta el alto precio que pagó al Tottenham por su incorporación:
«¿Irme? Está en manos del club, pero ponen las cosas muy difíciles»
En caso de iniciar la temporada, el galés sabe que Zidane cuenta por delante de él con otros jugadores como Vinicus, Rodrygo, Hazard, Asensio o Isco. Su futuro volverá a ser otro de los culebrones de un verano que ya acaba aunque este año, solapado por el que está protagonizando Leo Messi con el Barcelona.