Nunca he visto un hecho concreto de Moratinos a favor de la causa saharaui
Aminatu Haidar sólo pide que se respete su derecho, violado por España y Marruecos. La «solución» del ministro Moratinos no es respetar su derecho, sino concederle un privilegio, «una excepción». Las circunstancias en las que se hace esta oferta dan la verdadera dimensión de lo insidioso que es Moratinos.
I. LA NACIONALIDAD ESPAÑOLA DE LOS SAHARAUIS ANTES Y DESPUÉS DE 1976.
He tenido ocasión de publicar en 1999 dos artículos en los que he argumentado que el Real Decreto 2258/1976, de 10 de agosto de 1976 que daba a los saharauis un plazo de un año para optar por la nacionalidad española era contrario a la ley española. Por eso, he argumentado que a todos los saharauis que tenían la nacionalidad española antes de esa fecha se les debe reconocer la nacionalidad española de origen, sin excepción, mientras no suceda alguna de estas hipótesis:
- – que España reconozca a la RASD y, por tanto, la nacionalidad que esta república pueda atribuir a los habitantes de la antigua colonia española; o
- – que se haya concluido el proceso de descolonización y los saharauis hayan optado en referéndum su anexión a Marruecos desestimando la independencia. En ese momento el Sahara Occidental dejaría de ser un territorio no autónomo.
Descarto, de entrada, la tercera hipótesis, a saber, que España considere que la descolonización ya ha concluido con la anexión del Sahara Occidental por Marruecos. Y la descarto porque el Gobierno de España, en carta dirigida a las Naciones Unidas el 26 de febrero de 1976, manifestó oficialmente que:
La descolonización del Sahara occidental culminará cuando la opinión de la población saharaui se haya expresado válidamente
Sin embargo, el Gobierno español se niega a reconocer que los saharauis nacidos antes de 1976 (como es el caso de Aminatu Haidar, nacida en 1966) tengan la nacionalidad española de origen.
II. EL ORIGEN DEL CASO HAIDAR
El origen del caso Haidar es la expulsión arbitraria de esta activista de su país, el Sahara Occidental, por las autoridades de ocupación marroquíes. Después de ser expulsada del Sahara Occidental por Marruecos, España la impide embarcar rumbo al Sahara Occidental.
Esto son dos violaciones, una por Marruecos y la otra por España, del derecho que el Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos, que ambos Estados han ratificado, reconoce a Aminatu Haidar para entrar y salir libremente de su país, el territorio no autónomo del Sahara Occidental.
Artículo 12
1. Toda persona que se halle legalmente en el territorio de un Estado tendrá derecho a circular libremente por él y a escoger libremente en él su residencia.
2. Toda persona tendrá derecho a salir libremente de cualquier país, incluso del propio.
3. Los derechos antes mencionados no podrán ser objeto de restricciones salvo cuando éstas se hallen previstas en la ley, sean necesarias para proteger la seguridad nacional, el orden público, la salud o la moral públicas o los derechos y libertades de terceros, y sean compatibles con los demás derechos reconocidos en el presente Pacto.
4. Nadie podrá ser arbitrariamente privado del derecho a entrar en su propio país.
III. LO QUE PIDE AMINATU HAIDAR
Lo que pide Aminatu Haidar es, pura y simplemente, que España y Marruecos cumplan el Derecho Internacional. Que cumplan el tratado que libremente firmaron y ratificaron. Que cumplan los derechos que se han comprometido a respetar.
¿Tan difícil es exigir que se cumpla un tratado?
Como ha declarado Aminatu Haidar en una extraordinaria entrevista realizada por Tomás Bárbulo:
debo sacrificarme por un derecho individual: el regreso al Sáhara Occidental
IV. POR QUÉ LA OFERTA MORATINOS HACE IMPOSIBLE LO QUE PIDE HAIDAR
El ministro Moratinos aduce que, con el pasaporte español, Aminatu Haidar podrá viajar a El Aaiún a su casa con su familia.
Pero el ministro Moratinos oculta que, si Aminatu Haidar viaja como española a El Aaiún, las autoridades de ocupación podrían rechazarla en cualquier momento.
El conflicto se ha originado porque Aminatu sólo reconoce como nacionalidad suya la saharaui.
El problema que se plantearía si acepta la «oferta» de Moratinos es que, si Aminatu ostentase la nacionalidad española y las autoridades de ocupación le negasen la entrada de nuevo:
¿podría alegar que se ha violado así el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos?
Recordemos, art. 12.4 del Pacto:
Nadie podrá ser arbitrariamente privado del derecho a entrar en su propio país
Si Aminatu acepta la oferta de Moratinos y su país pasa a ser España: ¿tendría derecho para entrar y salir libremente del Sahara Occidental?
A la vista de los hechos, parece más que improbable.
V. EL GOBIERNO DE RODRÍGUEZ ZAPATERO QUIERE EVITAR A TODA COSTA EL CUMPLIMIENTO DEL DERECHO
La posición del ministro Moratinos en la crisis abierta por la violación de los derechos humanos de Aminatu Haidar es la de «arreglar» el asunto por cualquier vía diferente del reconocimiento a Aminatu Haidar de su derecho a entrar y salir libremente de su propio país.
Para ello, le ha ofrecido diversas «soluciones». La última, la de reconocerle, como concesión graciosa hecha a título de «excepción» y por motivos «humanitarios» algo a lo que Haidar tiene derecho, como el resto de saharauis: la nacionalidad española.
Con ello, Moratinos, aprovechándose de la gravedad del estado de la activista tras la prolongada huelga de hambre, consigue dos objetivos:
- – que Aminatu Haidar acepte que no tiene derecho a «entrar y salir libremente» de su propio país, el Sahara Occidental;
- – que Aminatu Haidar reconozca que los saharauis nacidos españoles no tienen derecho a la nacionalidad española, que pasa a ser una concesión excepcional.
Y todo esto por dos razones muy simples:
- – Porque el Gobierno español no quiere permitir a Aminatu Haidar salir, ahora mismo, en un avión rumbo al Sahara Occidental, como es su derecho.
- – Porque el Gobierno español no quiere presionar a Marruecos para que respete el derecho de Aminatu Haidar a entrar libremente en el Sahara Occidental.
VI. LO QUE NOS HA DESCUBIERTO AMINATU HAIDAR
Aminatu Haidar nos ha descubierto varias cosas importantes:
- – que Marruecos no respeta los acuerdos internacionales que suscribe.
- – que España es cómplice de los incumplimientos de Marruecos.
- – que poner de manifiesto la complicidad del gobierno de Rodríguez Zapatero con el majzén es algo que pone muy nervioso al ministro Moratinos.
VII. LO QUE SIGNIFICA EL «GESTO» DE MORATINOS
Lo que ha hecho Moratinos con su «ofrecimiento» de nacionalidad española a Haidar, realizado cuando su estado se ha deteriorado gravemente, es aprovecharse de su debilidad, de una situación angustiosa en la que la muerte se acerca a pasos agigantados para que renuncie a su derecho a entrar y salir libremente del Sahara Occidental y de paso reconozca que los saharauis nacidos como españoles no tienen derecho a ser españoles.
Creo que a esta nueva «propuesta» de Moratinos se le pueden aplicar las palabras de Haidar en la entrevista concedida a Bárbulo:
esa propuesta del Gobierno español me produce indignación, porque después de 34 años niega la existencia del pueblo saharaui, niega la patria que es el Sáhara Occidental.
Y es que, para conocer la credibilidad de la propuesta de Moratinos conviene leer la respuesta de Haidar a esta pregunta de Bárbulo:
P. Moratinos dijo en el Congreso que ha defendido los derechos de los saharauis «como nadie».
R. Nunca he visto un hecho concreto de Moratinos a favor de la causa saharaui
Cualquier estudiante de Derecho sabe que cuando existe un quebrantamiento del orden jurídico mediante la comisión de un hecho ilícito la única forma de restablecer el orden quebrantado es revocar el acto que produjo la violación.
El Gobierno Español SOLAMENTE puede reparar la violación del Derecho Español cuando hacer cuando le embarque en un avión. Si al llegar a El Aaiún Marruecos la rechaza, eso ya será una nueva violación de los derechos humanos por el régimen del sultán. Pero así, y sólo así, el Gobierno español cumplirá con su deber de respetar los derechos humanos. Todo lo demás es una trampa.