«El movimiento 15-M ha derivado en actos violentos«. Este es el principal punto de confluencia al que los periodistas Juan Carlos Girauta (comentarista en Cope) Arcadi Espada (El Mundo), Carmelo Encinas (comentarista en Veo 7 y Cadena Ser) y Daniel Tercero (La Voz de Barcelona) han llegado en la valoración que, para Periodista Digital.
Lo periodistas, todos ellos analistas cotidianos d ela realidad política española, valoran lo acaecido en Valencia, los improperios al alcalde de Madrid y el bloqueo del hemiciclo catalán.
Tanto Girauta como Espada se ha desmarcado de la opinión generalizada de que este movimiento comenzó como algo pacífico.
Para Girauta está claro que:
Ha habido una falta de reflejos por parte de los medios de comunicación y de los políticos que se han dedicado a acariciar el lomo de la bestia como si se tratase de un gatito. Todo el mundo estaba complacido diciendo que también eran indignados. Este movimiento ha estado instrumentalizado desde el primer momento por grupos antisistema, okupas y hasta de kale borroka. Nos estamos encontrando con lo que hemos consentido, que es que ayer se va a buscar a un político a su casa y hoy, por ejemplo, se secuestra el Parlamento catalán, que es un hecho gravísimo, con tintes claramente fascistitantes.
Y añade Espada que:
Creer que esto ha sido pacífico ha sido el primer malentendido. El movimiento nunca comenzó de manera pacífica. Usurpar la vía pública, el espacio público, no es comportarse pacíficamente. Este movimiento está transido por la violencia. Lo que sí ha ido es incrementándose el grado de violencia y cuando los principios se erosionan, todo acaba siendo posible.
Por su parte, Daniel Tercero aduce que la comparación con Grecia o Egipto, como ha visto en internet, le parece fuera de sitio:
Inicialmente, el movimiento 15-M era una buena iniciativa, con un manifiesto interesante, pero esto va camino de la deslegitimación. Lo que está pasando es lamentable y ya se están haciendo comparaciones en las redes sociales con Grecia y Egipto y no creo que esto, desde luego, tenga nada de pacífico.
Encinas considera que el movimiento ha ido evolucionando hacia una deriva violenta, pero no por quienes lo iniciaron, sino por los que se han ‘colado’ al socaire de la masa y que han acabado por usurpar el espíritu inicial:
Lo que ha ocurrido me parece mal, tanto lo del alcalde de Madrid como lo del Parlamento catalán. No tiene ni justificación ni disculpa. Sin embargo, me parece que esto es mucho peor porque en estos grupos, que es verdad que había empezado como algo pacífico, están con infiltrados radicales antisistema, ya no están quienes habían iniciado el movimiento 15-M, que, aparte de pacíficos, si de algo habían pecado era de ingenuidad. Estos señores que están protagonizando estos acontecimientos no tienen nada que ver con ese sentimiento inicial del 15-M.
EL PAPEL DEL MINISTERIO DEL INTERIOR
En cuanto al papel del ministerio del Interior, no hay un nexo común. Desde la concepción del tertuliano de la Cope y del columnista de El Mundo, que entienden que ha habido dejadez desde el minuto uno, a lo que entiende Carmelo Encinas, que cree que el departamento de Alfredo Pérez Rubalcaba ha actuado desde el momento en que se han permutado las reglas del juego o Daniel Tercero, que considera que la Policía aún está a tiempo de evitar que esto se desmadre.
Subraya Girauta que:
Ha habido completa pasividad. El candidato socialista a la presidencia del Gobierno ha mantenido la cartera de Interior y su actuación está condicionada por cuestiones de tipo electoral
Apunta Arcadi Espada que:
El Ministerio del Interior no ha actuado correctamente desde el primer día, permitiendo la usurpación de la vía pública, pero también tengo que decir que jaleado todo esto por buena parte de la opinión pública española
Daniel Tercero subraya que:
En Cataluña, el orden público es competencia autonómica, pero en otros casos, donde la competencia sí es de Interior, lo que puedo decir que es más fácil desalojar a 100 que a 3.000. En este último caso es muy complicado no desalojarlas sin que se produzcan problemas. De todas maneras, no entiendo que esto sea culpa del Ministerio del Interior, pero está claro que ahora es cuando se puede evitar y máxime si esto se extiende por toda España.
Y remacha Carmelo Encinas que:
El ministro del Interior lo dijo; mientras el movimiento sea pacífico, no tendrá que intervenirse, aunque es verdad que habían ocupado la vía pública sin permiso, pero si se empieza con la violencia, entonces se rompe la baraja y habrá que empezar a tomar cartas en el asunto. La actuación policial ha de ser coherente con la situación que esté aconteciendo. No se puede consentir que estos (los indignados) secuestren a nadie.