Las algaradas violentas de Barcelona -¡qué espectáculo tan grandioso ver a esos pijosprogres que tanto presumen de haber corrido antaño ante los «grises» correr «cagaos» despavoridos ante los indignados- no pueden en modo alguno hacer olvidar a la clase política sus desechos y sus detritus.
Porque si se olvidan, que se olvidarán, volverá a sonreir la primavera y entonces con 200.000 manifestantes en pie de guerra sabrán lo que es bueno.
No voy a jalear la violencia, of course, pero tengo para mi que ese inexportable de Artur Mas -144.603 euros de sueldo, el doble que el presidente del gobierno, 20.000 euros más para gastos personales, cuatro millones más en gastos de representación que el Gobierno, etc..etc..etc…no sabe lo que vale un peine. ¡Qué espectáculo tan grandioso el de un jefe de gobierno regional verle huir de los manifestantes en helicóptero!
No me extraña que Franco estuviera 40 años y se muriera en la cama…
Las lecciones del 15M las ha aprendido, por ejemplo, Esperanza Aguirre, que ha quitado 80 altos cargos, procede a las listas abiertas y abre las ventanas de la Puerta del Sol para que entre el aire fresco.
Se olvidan los que cargan sin piedad contra un Movimiento repleto de razón que el Sistema es imperfecto, muy imperfecto. Pero se olvidan también que ante los «excluidos» de ese Sistema sólo sirve robarles los argumentos. Esto es, depurar a mejor el sistema democrático; acabar con la corrupción, crear puestos de trabajo, terminar con las sinecuras y prebendas de una clase politica que en buena parte no nos representan.
Lo demás es pan para hoy y hambre para mañana.
Si esos muchachos que se alzaron en tiendas de campaña no consiguen trasladar a la sociedad que su lucha es justa y que su causa no tiene vuelta atrás todo habrá quedado en agua de borrajas.
Son gentes que dominan las nuevas tecnologías y, por ende, su capacidad de movilización es enorme. Es ahí donde reside su auténtico poder fáctico. Por encima de partidos politicos y banderías concretas.
He defendido, con problemas personales, su causa y sus argumentos.
Sólo les pido que no me dejen con el culo al aire. Pero no puedo sino saludar esa sentada valenciana ante un Parlamento autonómico cuajado de presuntos corruptos.
¿Está tan difícil entender esto?