Ángela Vallvey y Concha Minguela debaten en PD sobre el futuro de Ferraz

«El PSOE está disperso y desorientado porque no sabe quién será su líder»

Para Minguela, el tapado del socialismo es López Aguilar, mientras que para Vallvey, cualquiera menos Bono

El PSOE arranca la décima legislatura sumido en sus cuitas internas. Con un secretario general saliente, en Ferraz se proponen cerrar la crisis lo antes posible. Sin embargo, demasiados personalismos, un resultado electoral devastador y una cita vital en Andalucía donde se intenta no perder el último bastión de poder. Demasiados frentes abiertos como para que los socialistas estén centrados en hacer su tarea de oposición.

Para debatir sobre el futuro del Partido Socialista, Periodista Digital reunió a Ángela Vallvey, columnista de La Razón y a Concha Minguela, del diario A pie de calle.

Para Vallvey, el diagnóstico resulta bastante evidente:

Al principio sí creo que es razonable que la primera prioridad del PSOE sea la de resolver sus asuntos internos antes de cohesionarse como partido y hacer frente a sus tareas de oposición. Mientras no tenga arreglados esos problemas, no va a poder funcionar como una verdadera oposición. Además se está viendo cierta dispersión, de que no hay una unidad de criterio, de que no se sabe muy bien si va a ser Rubalcaba, Chacón o cualquier otro candidato que no conocemos. De momento, en el PSOE tienen que arreglar sus asuntos.

Por su parte, Concha Minguela añade que:

Casi coincido. Para mí el PSOE, desde que ha perdido las elecciones generales, está en estado de shock y no es capaz de reaccionar. Entonces, antes de las elecciones, ya estaba un poco desorientado y quizá pusieron demasiadas esperanzas en un candidato como Rubalcaba, que para mí era un candidato imposible. No niego la valía de este político, pero ha sido el coautor, corresponsable y vicepresidente de las medidas de Zapatero y son las que han llevado al Partido Socialista al hundimiento. Por mucho que quiso alejarse de la personalidad política de Zapatero, no tuvo tiempo para poder remontar.

Ambas analistas coinciden en que Rubalcaba:

Tenía el pasado de Felipe González y de Zapatero, pero le falta el futuro, aunque intentó dar ese salto, pero no tuvo el tiempo suficiente.

La columnista de La Razón entiende que:

Aunque los resultados fueron catastróficos para el PSOE, quizá la elección de Rubalcaba atenuó esa caída porque incluso las encuestas internas le auguraban un panorama aun por debajo de esos 110 escaños. Era el único candidato posible. Carmen Chacón hubiese sido un fuego de artificio.

Minguela opina que:

Creo que Rubalcaba no ha atenuado, sino que los electores no se lo han creído por su vinculación con Zapatero. Este ha sido un candidato de emergencia.

En cuanto a los futuribles a la secretaría general del PSOE, si existe algún tapado, para Vallvey no está nada claro:

Bono querría, pero desde luego no es un candidato tapado, sino más bien destapado. Cuando ganó Zapatero, la gente lo eligió contra Bono, porque a éste no le querían. El socialismo no ha cambiado tanto como para que saliese ahora Bono. Rubalcaba será un candidato de transición, quizá un par de años, pero saldrá otro secretario general, pero tampoco será un chavalito de 25 años.

Para Minguela, en cambio:

Para mí ese tapado podría ser Juan Fernando López Aguilar. Personalmente, mi candidata es Carmen Chacón, me parece una mujer con un currículum excepcional, de lo más brillante, en el Ministerio de Defensa lo ha hecho muy bien, es joven, tendrá que estar cuatro años fabricándose el carisma.

 

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Autor

Juan Velarde

Delegado de la filial de Periodista Digital en el Archipiélago, Canarias8. Actualmente es redactor en Madrid en Periodista Digital.

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