Tanto PP como PSOE se hunden ante la subida imparable de Ciudadanos
Si se celebraran este 2 de mayo de 2018 elecciones autonómicas en Madrid, el PP, que gobierna en la Puerta del Sol desde 1995 perdería la mitad de sus fieles y quedaría arrasado en las urnas por Ciudadanos (Cs).
El partido de Albert Rivera pasaría de ser la cuarta fuerza en el Parlamento regional a ocupar el primer puesto y quedaría en una posición excelente para rematar la faena en 2010 y desalojar a Mariano Rajoy de La Moncloa.
Está previsto que se celebren autonómicas y municipales el 26 de mayo de 2019 y un el año que resta hasta esa fecha puede hacerse muy largo para algunos, pero las cosas pintan fatal para el PP, porque lo que ocurra en esas urnas marcará indefectiblemente el resultado de las generales.
La batalla por la Comunidad de Madrid en las elecciones autonómicas del próximo año tiene una tremenda onda expansiva en la política nacional. No sólo por el peso de la capital, sino porque resulta clave en la pugna del centroderecha justo cuando el PP afronta su momento más bajo tras un cuarto de siglo de gestión.
Según la encuesta de Sigma Dos que publica ‘El Mundo’ este miércoles, realizada tras la dimisión de Cristina Cifuentes, el PP se desplomaría y perdería la mitad de sus votantes.
A apenas un año de las elecciones, si los votantes de la Comunidad de Madrid tuvieran que escoger una papeleta, el 30,4% optaría por la de Cs, 18,2 puntos más que en 2015.
Aunque alejado de la mayoría absoluta, el partido de Albert Rivera sería el único que aumentaría su número de diputados y, además, de forma muy notable.
Tendría entre 42 y 43 en lugar de los 17 que forman su grupo ahora debido a una importante fuga de votos fundamentalmente del PP (27,7%, lo que equivale a 290.000 votantes), pero también del PSOE (12,3%, 99.000 votantes).
El PP conseguiría ahora sólo el 22,6% de los sufragios, 10,5 puntos menos que hace tres años y casi 30% menos que en 2011.
Sólo conservaría 31 ó 32 escaños de los 48 que tiene esta legislatura, con lo que se dejaría en las urnas 16 o 17.
El PP empataría además en número de representantes con el PSOE, que, a su vez, en menor proporción pero también significativamente, pierde fuelle ante el avance de Cs. Pese a no estar lastrado por el desgaste propio de la acción de gobierno, el grupo mayoritario de la oposición pasaría del 25,4% de las papeletas, que le dieron 37 parlamentarios, a aglutinar sólo 22,2%, y quedaría como el tercer partido más apoyado por los electores y como posible muleta de la formación ‘naranja’.
A la cuarta posición caería Podemos desde el tercer lugar que ocupa ahora con 27 sillones en el hemiciclo de Vallecas. Las luchas intestinas de la formación morada para buscar a su candidato a presidente de la Comunidad de Madrid en 2019 pesan en la intención de voto de sus simpatizantes, que descendería casi dos puntos (de 18,6% a 16,8%) y dejaría su bancada con 23-24 miembros.
El sondeo acredita la transversalidad de Ciudadanos, ya que absorbería un 27,7% de sufragios procedentes del PP y un 12,3% del PSOE. Atraer al votante madrileño constituye un objetivo prioritario para la formación de Albert Rivera, que puede aprovechar el declive de un PP asaeteado por la corrupción, el desgaste del poder y la anemia ideológica e institucional.
Si no reacciona de forma contundente, el PP perderá en Madrid mucho más que un Gobierno regional. Perderá también la hegemonía en el centroderecha español y el Gobierno de España.
