Más solo en la bancada azul que Frodo Bolsón en la Tierra de Mordor, al menos al hobbit le acompañaba el fiel Samsagaz Gamyi, Wert escuchaba el 30 de octubre de 2014 en el Congreso las críticas a la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual.
Por un momento pareció que iba a entrar en el Hemiciclo Aragorn en persona, o que un nazgûl iba a penetrar en la sala a lomos de su bestia alada rompiendo la cristalera del techo. El momento friki de referencia a El Señor de los Anillos lo ofreció el socialista José Andrés Torres Mora, que en su discurso se remitió al Anillo Único forjado por el malvado señor oscuro Sauron para dominar el mundo.
En concreto, y después de haber citado a Séneca y haberse lamentado por la suerte del sector de la cultura se arrancó con un «En verdad que hay un anillo que los controla a todos». Interrumpido por la entrada masiva de diputados que acudían ante la cercanía de las votaciones del día, pudo continuar después de que Jesús Posada llamara al orden al resto del Hemiciclo:
Decía que hay un anillo que puede controlar a todos los anillos. Ese anillo está en La Moncloa y es el que controla la cultura.
Ahí es nada, comparar a Rajoy con el gran malvado de la principal obra de J.R.R. Tolkien y la sede del Gobierno con su reino, Mordor. Recordemos que dice la inscripción del Anillo Único:
Un Anillo para gobernarlos a todos, un Anillo para encontrarlos,
un Anillo para atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas.
Lo que se puede saber es si Torres Mora se imaginaba a Pedro Sánchez o a Susana Díaz transmutados en Gollum y merodeando en los alrededores de La Moncloa murmurando ‘mi tesooooroooo’. También pudiera ser que en su mente los líderes socialistas hicieran de Légolas y Gimli dispuestos a combatir junto a los hobbit de la SGAE para salvar a los pueblos libres de la Tierra Media de la cultura.
Poco antes, el socialista había tenido un arrebato poético para referirse a quienes trabajan en el sector cultural: «Son músicos, pintores, ingenieros del verso que como muchos otros construyen España». No tuvo, eso sí, una queja con respecto de la Tasa Google o Tasa AEDE, que tantas quejas ha suscitado por parte de numerosos internautas y de la que se van a beneficiar los grandes periódicos.
Quién sí hablo sobre la citada Tasa AEDE fue Carlos Martínez Gorriarán. El de UPyD, dijo de la norma:
De lo único que sirve es para ganar tiempo y, entre tanto, seguir controlando el oligopolio que existe en España entre política y medios de comunicación.
El portavoz del PP, Juan de Dios Ruano se dedicó a sacar pecho de lo logrado con la nueva norma, a la que pintó como la panacea contra todos los males de quienes crean obras que generan derechos de autor. Se defendió de quienes acusan al PP de pedir informes parciales: «Quienes piratean no hacen informes». Se ufanó, además, de proteger a los periodistas y las empresas editoras, si bien no citó en ningún momento la Tasa Google ni comentó los efectos que puede tener sobre internet.
Al final, sin que hicieran acto de presencia un grupo de orcos y otro de elfos para combatirse mutuamente, la norma fue aprobada en su redacción definitiva con 172 votos a favor, 144 en contra y cuatro abstenciones.