Sobrecoge comparar las reacciones de los diputados británicos ante el atentado terrorista a las puertas del Parlamento de Westminster.
Porque mientras en Reino Unido todo el mundo habla del diputado conservador Tobias Ellwood, héroe involuntario al tratar de reanimar al policía asesinado en el ataque, en España Podemos, nacionalistas y demás excrecencias cree que los nueve imputados por la agresión en 2016 a dos guardias civiles y sus parejas en Alsasua (Navarra), procesados por terrorismo, son también «víctimas», por estar siendo sometidos a «un juicio injusto y desproporcionado».
Imagen mundial. Reino Unido. El ministro @Tobias_Ellwood intentando reanimar al policía herido. En España hubieran corrido todos como ratas. pic.twitter.com/ZBPcZumJhs
— Anonymous (@Anonymous_UE_) 22 de marzo de 2017
Ellwood, exmilitar, trató de practicarle el boca a boca mientras le presionaba las heridas para que no se desangrase hasta que llegara el helicóptero y los médicos acudieron al rescate, aunque no pudieron finalmente salvarle la vida.
El diputado fue oficial en el regimiento de infantería de la Armada Británica y se retiró del Ejército en 1996, cuando ostentaba el rango de capitán. En la actualidad es subsecretario parlamentario en el Ministerio de Relaciones Exteriores desde julio de 2014, cubriendo Oriente Medio y África.
«Hizo el de boca a boca al policía y trató de taponar las heridas que había sufrido hasta que llegara el helicóptero y los médicos», informó al Daily Telegraph una fuente cercana a Ellwood.
¿Alguien se imagina en la misma situación a Pablo Iglesias, el mismo que confesaba alegrarse cuando veía como le partían la cabeza a un policía antidisturbio de una patada? Podemos equipara a agresores y guardias civiles en la condición de «víctimas». Por el contrario, en el Parlamento británico saben muy bien quiénes son las víctimas y quiénes los verdugos.
Lo recordó reprimiendo las lágrimas el diputado conservador James Cleverly al homenajear al policía y amigo asesinado Keith Plamer. Para los podemitas la agresión de Alsasua fue una pelea de bar, no terrorismo.
Da vergüenza que nuestros parlamentarios consideren como ‘héroes’ a los mismos que llevan años reclamando la expulsión de Navarra de las Fuerzas de Seguridad del Estado y hacen desfilar carrozas de la Guardia Civil con simbología nazi.–Tory MP who was friends with PC Keith Palmer from their army days pays tearful Commons tribute to him—
Escuchen el testimonio de un veterano guardia civil del País Vasco:
«Te hacían fotos por la calle, te amenazaban. A mí me quemaron el coche, me seguían por la carretera, me tiraron adoquines desde el puente y me reventaron la luna. Lo habitual. Lo que ha pasado ahora no es un caso aislado. Si pueden, los matan. Ha pasado siempre y desde que ETA ha dejado de matar estos, los batasunos, se han crecido. Como los políticos están tan suaves… estos actúan con más impunidad. Parece que hay un tratado de paz no escrito que no sé quién lo ha firmado».
Para los diputados británicos los héroes a los que hay que rendir tributo en el Parlamento son los que dan la vida protegiendo nuestros derechos. Podemos tiene claro que los ´héroes’ son otros, los que amenazan nuestras libertades y legitiman la violencia.