Pensábamos que había dejado de existir políticamente.
Rafa Mayoral, ¿se acuerdan? Aquel podemita que un día fue de los importantes, del círculo de Pablo Iglesias. Siempre más con pintas de conductor de Alsa que de representante político y siempre a la izquierda de la izquierda de la izquierda, rozando todo lo extremo.
Las razones por las que Rafa Mayoral se había diluido como un azucarillo en los últimos ¿años? en su escaño del Parlamento las trataremos en otra nota, pero aquí vamos a destacar cómo reapareció como un matón en el Congreso cuando le tocaron donde más le duele, en el Iglesias, y el porqué de este momento.
Fue Iván Espinosa de los Monteros, el pasado jueves 26 de mayo de 2022, cuando pidió la palabra en el transcurso de la sesión plenaria en el Congreso de los Diputados para responder al portavoz podemita que estaba ‘maltratando’ a VOX por el tema de las armas -relacionándolo miserablemente con la matanza de Texas-. Y quiso el diputado devolver la jugarreta a los podemitas:
«El portavoz de Podemos nos ha acusado de querer repartir armas, y yo le recuerdo que ‘el derecho a portar armas es una de las bases de la Democracia’, dijo Pablo Iglesias, el fundador de Podemos. Muchas gracias».
La tremenda andanada de Espinosa aún le debe escocer al portavoz podemita, Jaume Asens, y a todo el podemismo en general. El diputado de VOX hizo referencia a unas palabras de Iglesias en el año 2012 en ‘La Tuerka’ en las que argumentó precisamente eso, sin una sola coma.
Fue justo tras ese golpe dialéctico cuando emergió Mayoral, agazapado hasta entonces en su escaño, muy nervioso y a voces: «¡Es una vergüenza!»
Hasta Meritxell Batet, presidenta de la Cámara, tuvo que llamar varias veces la atención pidiendo silencio al exaltado Mayoral.
Espinosa continuaba con su fantástica performance y se señalaba el oído asegurando: «No le oigo».
Acto seguido, bien enmascarillado de negro como si fuese El Zorro o algo así, Mayoral se levantó retador y se marchó de la Cámara Baja. ¿Será para no volver? Parece imposible. Y si no que le pregunten a Alberto Rodríguez.
Espinosa machaca a Iglesias
Y es que lo de Espinosa de los Monteros esta semana contra Pablo Iglesias y seguidores ha sido una bestialidad.
El diputado se desempeñó a fondo para sacar de sus casillas al propio exvicepresidente a través de Twitter, y vaya si lo consiguió:
Está ya muy visto el modelo pijiprogre consentido, que no ha tenido que afrontar una responsabilidad en su vida, pero da lecciones a los demás desde su impotencia.
Eso sí, siempre con rencor a los hijos de los que han destacado por algo; pues lo siento por sus hijos. https://t.co/GNi0cxcJ0B
— Iván Espinosa de los Monteros (@ivanedlm) May 26, 2022
La dura realidad del podemita
Rafa Mayoral fue uno de los tipos más importantes de Podemos. Del Podemos de Pablo Iglesias del que cada vez queda menos. Mayoral aún no estaba al principio de todo, allá por 2013, cuando el grupito lo formaban Iglesias, Monedero, Errejón, Bescansa y Alegre. Ninguno queda de aquellos.
Mayoral apareció poco después, al tiempo que Irene Montero, y lo hizo con fuerza. Pronto se convirtió en una de las caras visibles de Podemos y en uno de los hombres fuertes de Iglesias. En la guerra fratricida por el poder en 2016, Mayoral se comportó como uno de los bulldog del líder, un pablista férreo, y el número 5 de la lista de Unidas Podemos por Madrid en las elecciones de 2019.
Pero después fue perdiendo fuelle. No entró en el Gobierno, sigue como diputado raso y desde 2014 su cargo orgánico es el de secretario de Relación con la Sociedad Civil y Movimientos Sociales de Podemos, que no sabemos muy bien ni para qué sirve.
Desde la salida de Iglesias del partido, a Mayoral, probablemente, es lo que le quede, el recuerdo de aquel grupo del que formó parte antaño. Hoy no es un nombre importante para nadie: ni para las amiguis Belarra-Montero ni para Yolanda Díaz y su suma…
Por eso le dolió tanto que Espinosa le sacara la hemeroteca del ‘mejor’ Iglesias de ‘La Tuerka’ de 2012.