Reprobación presidencial.
Los expresidentes de Gobierno, Felipe González (PSOE) José María Aznar y Mariano Rajoy (PP), han criticado con fuerza la extensión de la Ley de Memoria Democrática hasta el año 1983, propuesta por el presidente Pedro Sánchez con el apoyo de Bildu.
Este miércoles, Rajoy ha expresado que es «triste y absolutamente lamentable» el acuerdo del Ejecutivo con los ‘herederos de ETA’. El proyecto de Ley se aprobó hace dos días en comisión en el Congreso, también con el apoyo del partido vasco, PNV, y con la abstención del ERC catalán.
«Ayer el propio Felipe González decía que eso le sonaba muy mal. A mí me suena peor», afirmó Rajoy, durante un acto realizado en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en Santander.
El expresidente ha explicado ETA fue «un enemigo declarado» de la Transición, que trajo la democracia y la Constitución al país. Señala que durante esos años, la banda terrorista atentó «con más saña», en la que sus ataques ocasionaron más muertes y en los que las personas se vieron «privadas de sus derechos y libertades».
«ETA fue contra la Transición española y contra la Constitución Española y ahora realmente resulta triste y absolutamente lamentable que el Gobierno haya caído en ese pacto con Bildu. Hay cosas por las que no se puede pasar porque es que son ininteligibles. No las entiende nadie», ha atizado.
Esta postura de Rajoy se suma a las críticas del también expresidente Felipe González, que el día de ayer se mostraba contrario a esta propuesta, al señalar que temía que “las memorias se conviertan en desmemorias” con esta reforma. Aunque reconoció que debía analizar el proyecto a fondo, explicó que “cuando lo vea les diré, pero sonarme, no me suena bien”.
Con esta reforma a la ley se incluiría a todas las personas que sufrieron torturas o tratos denigrantes, violatorios de los Derechos Humanos, hasta el año 1983; período en el que de acuerdo a los terroristas, sufrieron una ‘guerra sucia’ por parte del Estado español. Con esta extensión en el período a considerar, se incluye el primer año de la Legislatura de González.
El exgobernante, José María Aznar, también criticó con fuerza la sumisión de Pedro Sánchez con los independentistas, que tiene como último ejemplo, la nueva Ley de Memoria Histórica, a la que calificó de «disparate». Incide que es un proyecto «hecho y pactado con terroristas».
Por su parte, el único exmandatario que ha valorado positivamente ha sido José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE), que considera que la democracia «se perfecciona» con esta nueva Ley de Memoria porque «reconoce a los olvidados».
Cabe recordar que hace poco, el expresidente se mostraba orgulloso de los exmandatarios socialistas de Andalucía condenados por el caso de los ERE, Manuel Chaves y José Antonio Griñán.