Es lo de todas las sesiones de control al Gobierno socialcomunista.
Cada vez que Pedro Sánchez tiene que comparecer para responder a las preguntas de la oposición, el presidente es consciente de que tiene que atravesar un auténtico Vía Crucis.
Y es que no solo es la oposición conformada por PP y VOX quien le mide el lomo al líder socialista. También sus propios socios de legislatura están en modo campaña electoral para el 28-M y no dejan un respiro al inquilino de La Moncloa.
Este 26 de abril de 2023, la portavoz del Grupo Parlamentario del Partido Popular, Cuca Gamarra, fue directa a la yugular dejándole en ridículo con esa carrera desenfrenada a la hora de prometer pisos como si no hubiera un mañana:
Mire, señor Sánchez, usted no cesa a nadie por algo que está íntimamente ligado al concepto que usted tiene de la política de vivienda. Hasta este momento la única política de vivienda que a usted le ha interesado ha sido seguir residiendo en La Moncloa. Ahora hemos descubierto que también blindar a los okupas y ya se hacen apuestas sobre cuántas viviendas anunciará hoy. Eso sí, lleva cinco años y ha construido cero viviendas.
Gamarra le anunció que ya que es incapaz de cesar a nadie en el Gobierno, al final serán los españoles quienes tengan que hacerlo en las urnas:
Mire, señor Sánchez, como usted no va a cambiar y es incapaz de cesar a nadie, serán los españoles en las urnas quienes propicien el cambio que España merece. Entre todos derogaremos el sanchismo, que es lo que hace falta en España para enderezar el rumbo de un Gobierno en descomposición.
En la primera parte de la intervención, la portavoz de los populares también acusó a Pedro Sánchez de no mover un solo dedo a la hora de cesar a ministros y altos cargos del Ejecutivo, a excepción hecha de lo sucedido con González Laya al frente de Exteriores y por indicación / orden de Marruecos:
Señor Sánchez, la competencia para nombrar y cesar ministros corresponde al presidente del Gobierno… hasta que llegó usted. Ahora todos le faltan al respeto y siguen todos en sus puestos. Es reo de sus socios, de sus líos y hasta de usted mismo. Ahí está Irene Montero después de 1.000 rebajas de condenas y de su voto en contra a la reforma del solo sí es sí sigue mereciendo su confianza. ¿Es su confianza o es su temor a que le desalojen de la Moncloa?
Ahí está el señor Marlaska, reprobado por el Congreso, condenado por el Tribunal Supremo y censurado por una parte importante de sus compañeros en el Consejo de Ministros. Ahí está la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, que se manifiesta contra la ministra de Justicia en la mismísima puerta del Ministerio, ministra de Justicia para la que piden la dimisión jueces, fiscales y funcionarios de Justicia, pero ella se va a la feria. O la vicepresidenta segunda, hoy ausente, que le llama a usted machista y que dice que Marruecos es una dictadura.
A quien sí cesó usted fue a la ministra de Exteriores, González Laya, pero todavía no ha desmentido que lo hizo porque lo pidió Marruecos. ¿A qué tiene miedo? ¿Tiene algo que ver con el robo del contenido de su móvil? ¿Se ha dado cuenta de que le han tomado la medida tanto dentro del Consejo de Ministros como fuera de España?
