Reforzar vínculos con descendientes de los moriscos puede mejorar la situación en África.
Buscar interlocutores válidos para encontrar soluciones en el continente africano pasa, según este diputado socialista, por encontrar personas leales entre las tribus locales. «Hablar más con los pueblos africanos para combatir aquello que nos perjudica» como los secuestros de europeos en países como Somalia o Mauritania.
Recientemente, José Antonio Pérez Tapias presentó un proposición no de ley en el Congreso (aprobada en la Comisión de Exteriores) para subrayar lo siguiente:
• Reconocimiento institucional de la injusticia que en su día se cometió con los moriscos expulsados de España.
• Reforzar los vínculos económicos, sociales y culturales con poblaciones del Magreb y África subsahariana (entre estos países está Mauritania).
Según señala este diputado,
«Los interlocutores que nos hacen falta en África pueden ser los descendientes de los moriscos que fueron expulsados de España porque son comunidades que mantienen un vínculo y una memoria con nosotros».
«Si reforzamos esos vínculos se facilitaría que las relaciones con países como Marruecos o Mauritania fueran mejores»
APRENDER DE LOS ERRORES
Pérez Tapias explica que de las similitudes entre el problema africano y Afganistán podemos sacar una lección.
«El giro de Obama respecto a la política de EEUU en Afganistán se debe a la constatación de que fue un error no contar con quienes allí tienen el protagonismo. No contar con los líderes tribales».
«La estrategia en ambas regiones creo que pasa por buscar esos líderes tribales que puedan operar como leales interlocutores de pactos y soluciones.»