Los mismos que en hace tres años se volcaron con Zapatero para clamar por un cordón sanitario que aísle a la derecha «cerril, ultramontana y troglodita» del PP ahora han suscrito un manifiesto para hacer pública la «preocupación social» por el acoso al juez Baltasar Garzón y la «gravísima situación» que se derivaría de la posible suspensión cautelar del magistrado.
Entre los firmantes de la declaración se encuentran escritores como Rosa Regás o José Luis Sampedro, actores como Pilar Bardem, Álvaro de Luna, Federico Luppi, José Sacristán, Eusebio Lázaro, Juan Diego, Juan Diego Botto, Juan Echanove, Rosa María Sardá y Pepe Viyuela, los directores de cine José Luis Cuerda y José Luis García Sánchez y músicos como Luis Pastor o Miguel Ríos.
El manifiesto califica como una «perversa paradoja» que los «presuntos delincuentes erigidos en acusadores conviertan al juez que los investiga en reo», y crítica que se llegue a esta situación «por mor de la investigación de dos de los delitos más graves que pueden dañar un sistema democrático»: los crímenes contra la humanidad y la corrupción.
El TS investiga a Garzón por los cobros que recibió durante su estancia en la Universidad de Nueva York entre 2005 y 2006, por investigar las desapariciones durante la Guerra Civil y el franquismo y por ordenar intervenir las comunicaciones en prisión entre varios imputados en el «caso Gürtel» y sus abogados.
El actor Eusebio Lázaro, uno de los promotores de la iniciativa, ha explicado a Efe que a lo largo de la última semana se han conseguido un centenar de firmas del mundo de la cultura para denunciar «las dimensiones de inconcebible acumulación que está tomando el caso» y que hacen temer que pueda llegar hasta los tribunales internacionales.
Los firmantes, entre los que también están los pintores Juan Gomila, Alvar Haro o Nieves García, muestran su «preocupación por la gravísima situación que se derivaría de un probable apartamiento» de Garzón de sus funciones.
«Sobre todo -indican- porque la sociedad identifica y agradece su dedicación y su lucha contra la delincuencia, el terrorismo y la corrupción».
La declaración hace alusión también a las recientes declaraciones del presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Dívar, «en defensa» de los magistrados del TS y subraya que los ciudadanos «compartimos enteramente» la preocupación porque se pueda quebrar la confianza en las instituciones.
En este sentido, añade que «reiterando el máximo respeto a las instituciones de la Justicia y para que no se quiebre la confianza deseada, ponemos en ellas la máxima esperanza de que el ‘caso Garzón’ se resuelva a favor del Derecho en un país en democracia y en contra de la impunidad de los graves delitos perseguidos por el magistrado».