La actitud conciliadora con Montilla y Mas no la extiende el Gobierno Zapatero al PP
Artur Mas ha lanzado un duro aviso a Zapatero: si no se pliega a sus deseos y maniobra para saltarse algunas de la slimitaciones puestas por el Tribunal Constitucional al Estatuto de Cataluña, CiU no le apoyará en nada y forzará su salida de La Moncloa mucho antes de lo que le gustaría al presidente socialista.
Aunque Mas ha puntualizado que no no es una «amenaza«, se trata de una amenaza en toda regla. Las contundentes palabras del líder de Convergencia i Unió son «la respuesta» a la valoración hecha ayer por Zapatero dando por buena la sentencia del TC sobre el Estatut.
Aunque Zapatero, asustado por la presión de los nacionalistas catalanes y apremiado por el propio Montilla y el PSC, ya ha filtrado que algunos aspectos del texto anulados podían ser recuperados por otras vías, inicialmente valoró la sentencia como el «fin» de «todo un proceso de ampliación de la descentralización política».
La advertencia hecha por Mas va tanto para el PSOE como para el PP en la medida en que el líder convergente considera que esta postura era representativa de los populares y ahora el partido del gobierno se está sumando a ella.
El presidente de CiU le ha dicho a Zapatero que en lo que queda de año su partido intentaría garantizar el apoyo al gobierno español para salvar los muebles ante la crisis, pero le ha advertido de que vaya con cuidado con sus declaraciones porque está en la mano de la federación nacionalista que el Gobierno socialista se quede sin apoyos.
Ha recordado que hace unos meses cuando se votó el decreto del recorte del déficit público en el Congreso de los Diputados el Gobierno hubiera podido caer, sin embargo la norma se aprobó gracias a la abstención de CiU.
ZAPATERO ABRE LA PUERTA AL CONSEJO JUDICIAL CATALÁN ELIMINADO EN EL ESTATUTO
Al Gobierno socialista no le llega la camisa al cuerpo. Con el sombría horizonte d eunas elecciones catalanas que pintan muy mal para el PSC, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, precisó este viernes hasta dónde está dispuesto a llegar Zapatero para agradar a los nacionalistas catalanes.
Zapatero ya ha dicho que algunos aspectos del texto anulados podían ser «recuperados por otras vías«, lo que dejaría la sentencia del TC en papel mojado.
Fernández de la Vega dijo, tras el Consejo de Ministros, que veía «espacio» suficiente para que Cataluña y las Comunidades Autónomas que lo deseen puedan tener consejos del poder judicial con competencias delegadas por la Ley Orgánica del Poder Judicial y en el marco de la Constitución.
Este es uno de los aspectos más importantes del Estatuto mutilados por el fallo del Constitucional. El artículo 97 del texto consagraba el Consejo Judicial de Cataluña, y otros 13 artículos anulados abordaban esa misma cuestión.
Respecto a Mas y CiU, todo son sonrisas y guante blanco.
«¿Se ha acabado algo? No. Aquí lo que se ha culminado es el objetivo propuesto por el Gobierno de impulsar las reformas estatutarias, y ahora lo que hay que hacer es seguir desarrollando el Estatuto porque hay margen para ello».
La actitud conciliadora con Montilla y Mas no la extiende el Gobierno Zapatero al PP.
Con respecto a las declaraciones del ex presidente José María Aznar, que atacó a Zapatero por el «lío» del Estatuto, y a otras anteriores de Mariano Rajoy pidiendo serenidad tras el fallo, De la Vega acusó a este último de «falta de autoridad» por «el barullo en el PP, donde se cruzan declaraciones contradictorias».