El presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, afirmó hoy que el vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, es «una de las personas más inteligentes» que ha conocido, pero insistió en que en el PSOE «no hay nadie que pueda resultar imprescindible».
Bono hizo estas declaraciones a los periodistas en los pasillos del Congreso, que se arremolinaban con expectación en las cercanías de su despacho tras ver salir del mismo a Rubalcaba.
El presidente del Congreso rebajó las expectativas al asegurar que el vicepresidente se había limitado a tomar un café en honor del 48� cumpleaños del jefe de prensa del primero, José Luis Fernández. «Es a lo único que ha venido hoy Alfredo Pérez Rubalcaba», garantizó.
Cuando se le hizo ver que el encuentro había durado unos 45 minutos, Bono bromeó: «Yo, cuando estoy con Alfredo, no cuento los minutos». Pero, en cualquier caso, dijo que no hubo «ruido» sucesorio como el que él mismo criticó anteayer a sus compañeros socialistas. «Mi despacho es un sitio tranquilo», evocó.
Según su testimonio, la reunión se centró en las «risas y bromas» por la respuesta que Rubalcaba dio en la sesión de control de hoy al diputado del PP Ignacio Gil-Lázaro, en su habitual pregunta sobre el «caso Faisán». El ministro preguntó al diputado qué haría sin él los miércoles y encarnó la relación que mantiene con él en la canción «Sin tí no soy nada», del grupo de pop Amaral.
«SUBLIME»
«Desde que soy presidente del Congreso, es la vez que más me ha costado contener la risa. Procuro ser imparcial y objetivo pero hay resortes que se mueven al margen de la voluntad», afirmó Bono, para quien Rubalcaba «ha estado verdaderamente sublime».
Preguntado si el PSOE sin Rubalcaba no es nadie, el presidente del Congreso apeló a la historia del partido para defender que «aquí todos somos necesarios, pero nadie es imprescindible». Sólo que, abundó, «destacan las personas con más valía, y con más inteligencia y más capacidad», y «obviamente, Rubalcaba es uno de ellos.
Bono no quiso contestar si, a partir de las dos reuniones que mantuvo en el Congreso hace unas semanas con el propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la de hoy con Rubalcaba, ve mejor a uno u a otro para concurrir a las elecciones generales de 2012.
«�Usted se cree que con motivo de un cumpleaños de mi jefe de prensa yo voy a entrar y enzarzarme en estas cuestiones?», preguntó al informador que le interpeló. «Hasta estoy dispuesto a hablarle en euskera o en catalán», bromeó, recordando el incidente del Pleno de ayer en el que dos diputados utilizaron dichas lenguas para defender su introducción en la Cámara Baja.
En cambio, el presidente del Congreso sí quiso lanzar unilateralmente un mensaje: «Un partido como el mío ha acreditado a lo largo de la historia que no se presenta a las elecciones para perderlas». En esa línea, advirtió contra cualquier creencia de que el PSOE sea «un partido dormido» y auguró que «a lo mejor a alguien le puede pesar» haberlo sospechado.
