El Partido Popular ha enviado a sus cargos un listado con «las diez cosas» que, a su juicio, los españoles se juegan en las elecciones autonómicas y municipales del próximo 22 de mayo, una cita en la que, según dice, «los ciudadanos podrán poner fin a las políticas socialistas de Zapatero, sus ministros, sus presidentes autonómicos y sus alcaldes».
Según recoge el PP en su argumentario de campaña, está en juego encontrar o mantener un empleo; que no suban otra vez los impuestos; que no se vuelva a recortar las pensiones y los sueldos; cambiar «el despilfarro» de las políticas socialistas por la austeridad; o un futuro para el millón de jóvenes sin empleo.
Ese listado incluye también la reforma de la educación para vencer el fracaso escolar; que no se quiten las ayudas a la maternidad y la conciliación; apoyar a las pymes y autónomos para que no tengan que cerrar sus negocios; que los jóvenes no tengan que irse al extranjero para tener oportunidades; y la transparencia en la gestión del dinero de todos los españoles.
«UNA CAMPAÑA POSITIVA»
El PP asegura en el mismo argumentario, al que ha tenido acceso Europa Press, que será una campaña «positiva» para «dar soluciones a los problemas de los ciudadanos». El objetivo del PP, añade, es conseguir la recuperación económica y la creación de empleo.
Además, se hace eco de la reciente encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), un sondeo que, a su entender, reconoce que «la inmensa mayoría de los españoles confía en las políticas del PP para superar la crisis en sus comunidades autónomas».
«Los españoles quieren censurar con su voto las políticas socialistas que nos han llevado al paro y la recesión económica», subraya. Eso sí, recuerda a los suyos que la única encuesta válida «son las urnas». «Necesitamos hasta el último voto para que el cambio en España sea una realidad», concluye.
