El concejal de Cultura y Festejos, José Julián Gregorio, presentó el pasado 12 de diciembre d e 2011 la programación de actos navideños, que principian el próximo viernes. El concejal aseguró que el presupuesto para este año es austero, en total 43.500 euros, 151.500 euros menos respecto al pasado año, cuyo coste ascendió a 195.000 euros. Por eso, «estas navidades van a estar en consonancia con la filosofía marcada desde el Gobierno regional, que busca el equilibrio presupuestario», explicó Gregorio
«Pido comprensión y disculpas a los comercios por una decisión de no encender, este año, el alumbrado hasta este viernes 16 de diciembre», dijo el concejal que explicó que el ahorro en energía por las luces de Navidad «se necesita más que nunca para sacar adelante este Ayuntamiento».
Desmontar una mentira
José Julián Gregorio defendió el reajuste presupuestario que está llevando a cabo desde sus concejalías, «donde se está haciendo más con menos», por eso, quiso «desmontar públicamente las mentiras socialistas» ya que en el último Pleno se dijo que las ferias de San Mateo había sido las más caras de la historia en la ciudad, «algo que es mentira».
El concejal explicó que el presupuestos de Festejos para 2011 elaborado por los socialistas fue de 1.040.000 euros, a los que hay que añadir el apartado de alquiler de casetas y enseres que asciende a 170.000 euros, lo que suma en total 1.210.000 euros.
Gregorio especificó con datos reales que el estado de ejecución de gasto a fecha de 1 de junio de 2011, «cuando nosotros no estábamos al mando del Ayuntamiento» arrojaba dos partidas con números rojos con un total negativo de 48.000 euros.
No obstante «y lo que es mucho peor y los talaveranos deben conocer es que el 1 de junio los socialistas se habían gastado de este presupuesto 1.103.842 euros», por lo que para el resto de la programación de Festejos hasta diciembre «habían dejado nada más que 106.158 euros».
Así, el concejal desveló que el anterior equipo socialista había derrochado el dinero municipal «y en tan solo seis meses habían gastado el 90 por ciento de lo presupuestado». Sin embargo, José Julián Gregorio defendió que con el escaso margen de maniobra que le han dejado y con poco más de 118.000 euros el Ayuntamiento sacó adelante citas culturales y de ocio como la Noche de San Juan, el Festival de Jazz, el encuentro de Bandas de Música y Cornetas, y las Ferias de San Mateo; y estos últimos festejos se completaron con una modificación de créditos mínima.
Invitación de Ramos al PSOE
Por otro lado, el viceportavoz del equipo de Gobierno, Jaime Ramos, ha invitado al portavoz del grupo municipal Socialista y al resto de concejales de la oposición a que pongan en marcha una «política seria y coherente» para ayudar al equipo de Gobierno a sacar adelante a un Ayuntamiento «que se encuentra en la ruina por los malos gestores que hemos tenido».
Ramos aseguró «que es momento de arrimar el hombro» y no de seguir ejerciendo una política de «pillos» como la que están llevando a cabo el portavoz socialista y sus compañeros, «que primero arruinan al Ayuntamiento, lo dejan arrasado y luego nos echan la culpa a nosotros, que estamos arreglando los platos rotos que nos han dejado».
El viceportavoz municipal lamentó que los socialistas «no hayan reconocido sus errores ni hayan pedido perdón por todo el daño que han hecho a Talavera». Ramos insistió en que el equipo de Gobierno se ha visto «entre la espada y la pared», y para seguir pagando las nóminas de los empleados del Consistorio no ha tenido más remedio que pedir un crédito con el que «pagar el remanente negativo [reposición de saldo] de tesorería que nos han dejado en herencia».
«Creo que con estas cuentas, que demuestran la bancarrota del Ayuntamiento ha quedado más que claro que los socialistas no son de fiar», subrayó Ramos, quien advirtió que los concejales socialistas deberían ser conscientes «de los números rojos que tenemos por su ineficacia y por su insistencia en despilfarrar el dinero de todos los talaveranos».
Por último Jaime Ramos, aconsejó a los socialistas «que dejen atrás los pucheros y los lamentos» y en vez de quejarse por que el equipo de Gobierno «cuente la verdad sobre la realidad del Ayuntamiento», empiecen a preocuparse «aunque solo sea un poco por el bien de esta ciudad».
