El programa de entrevistas de actualidad El Círculo, que conduce Ely del Valle enTelemadrid ha recibido este miércoles 28 de marzo de 2012 la visita de Carlos Floriano, vicesecretario de Organización del PP, quien tras las elecciones andaluzas dijo que el PP no podía dejarse invadir por la melancolía.
El secretario de Organización explicó que pronunció estas palabras porque el resultado del 25M ha dado la
«tercera victoria consecutiva al PP en Andalucía. Siempre te fijas el objetivo de ganar y gobernar. Hemos conseguido ganar. Vamos a ver qué pasa con la oferta de Arenas. En todo caso te queda la satisfacción de ser quien lidera la mayoría de los andaluces. Javier Arenas, con un trabajo muy serio, nos ha puesto por delante. No hemos sacado mayoría absoluta como decían las encuestas, pero no nos pueden ganar las encuestas, quienes hemos ganado hemos sido nosotros. En el pasado el PSOE llegó a sacar veinte puntos al PP en Andalucía, ahora hemos ganado nosotros».
Sin embargo, 400.000 personas que votaron al PP en las Elecciones Generales dejaron de hacerlo el pasado domingo. Floriano prefirió tirar balones fuera.
Para Floriano no existe una sola razón que explique esto, sino que es un conjunto de causas, aunque subrayó que «Griñán acertó al separarse de Rubalcaba y Zapatero, eso explica que el castigo al PSOE no haya sido mayor».
«Lo mejor para Andalucía -prosiguió- no es un acuerdo PSOE-IU. Repartirse el poder y los sillones es cosa de otros, nosotros no estamos a eso. Lo nuestro es solucionar los problemas de los andaluces y eso va a ser muy difícil en este momento con PSOE-IU».
De la situación en Extremadura dijo que cree que «IU en Extremadura respeta la opinión de las bases, no lo que le digan en los despachos de Madrid».
El dirigente popular aseguró que «las reformas no se van a parar» por la huelga.
«Es sorprendente que no se hiciera nada para frenar cinco millones de parados y que ahora se plantee una huelga general, cuando no han pasado ni cien días, contra quienes estamos adaptando nuestro mercado laboral al de Europa, salvo que se explique por una cuestión política». «Nos quedan tres años y nueve meses para sacar a España de la crisis».
En cuanto a las formas, el secretario de Organización dijo que van a «a intentar llegar a todo tipo de acuerdos, pero el diálogo no puede ser un burladero tras el que te refugias para no gobernar». «Una de nuestras tareas es explicarle a la gente lo qué vamos a hacer. La mayoría de los ciudadanos se sienten bien gobernados, otra cosa es que haya gente que no le guste y lo respetamos».
Oriol Pujol, secretario general de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), ha defendido la independencia económica de Cataluña frente a una España donde dice que hay «aguas podridas».
Floriano comentó al respecto que
«parece mentira que alguien de esa edad rezume ese extremismo. Es lo peor que le puede pasar a un partido político que ha sido central. No salimos de la crisis con pactos fiscales sino generando confiando en los mercados. Me gustaría que Convergència volviese al catalanismo como defensa de la catalanidad dentro de España, influyendo en los gobiernos de España», aunque admitió que el PP va a seguir pactando con CiU.
«Hay una mayoría de votantes que entiende que es bueno llegar a acuerdos y no intentar imponer las cosas. Tenemos nuestras razones, pero otros, aunque no las compartamos, también tienen las suyas».
«Alicia Sánchez Camacho -prosiguió- ya dijo que esa no puede ser al posición de un partido al que se apoye. Esas posiciones radicales no son sostenibles. Al PP le queda un gran trabajo por hacer para que nuestra presencia en Cataluña sea cada vez más importante e influyente para que esas posiciones radicales pasen a un segundo plano. No es tolerable que se hagan determinados planteamientos cuando al mismo tiempo se forma parte del juego democrático».
Para terminar, Carlos Floriano se mostró en contra que de Patxi López defienda la excarcelación de Otegi. «Presionar a los tribunales de Justicia no nos corresponde. Nos parece intolerable que el ejecutivo y el legislativo trate de presionar al judicial. Otegi está en la cárcel por un delito y los jueces tendrán que determinar la culpabilidad o la inocencia».
