Santiago Cervera llegó a Madrid de la mano de Ana Pastor

El protegido de Rajoy que arruinó su carrera por ir de ‘sobrado’

De un carácter "complejo" es hábil en la política de despacho pero poco dado a relaciones sociales

Aunque este 10 de diciembre de 2012 Santiago Cervera (Pamplona, 1965) ha saltado a la primera línea de la actualidad informativa por su detención en la jornada anterior en un extraño caso sobre un supuesto intento de soborno al presidente de Caja Navarra, no es la primera vez que el diputado navarro protagoniza titulares.

Cuando, en noviembre de 2008 el Partido Popular y UPN rompieron la alianza que mantenían hasta aquel momento, Cervera se integró en la formación de Mariano Rajoy, mientras que su compañero Carlos Salvador se mantuvo en las filas de Unión del Pueblo Navarro, pasando a formar parte del grupo mixto.

Cervera explicaba en privado ese reparto de los dos escaños entre ambos partidos en términos de estricto interés personal de los diputados. Según sostenía, a Salvador le interesaba UPN por pasar más tiempo en Navarra mientras que él prefería el PP por vivir casi todo el tiempo en Madrid. De ser cierta esta versión, que algunos dentro del PP ponen en duda, algo tendría que ver que su esposa, Monica Ridruejo, no tenga vinculación con la comunidad foral.

Es un matrimonio que tal vez pudiera ser producto de un amor surgido años después de conocerse en los pasillos de Prado del Rey. Mónica Ridruejo fue nombrada directora general de RTVE el 14 de mayo de 1996. Dimitió del cargo en enero de 1997. Medio año antes de su dimisión, en julio de 1996 Cervera (que había sido senador de 1993 a 1996) se había incorporado al Consejo de Radio Televisión Española. Formaría parte del mismo hasta junio de 2000.

Ocho años después, en julio de 2008 la pareja contraía matrimonio en Mallorca. Entre los invitados presentes en el enlace había dos personas que han sido clave en la carrera política del diputado ahora dimitido: Mariano Rajoy y Ana Pastor.

Cervera compatibilizó durante dos años su asiento en el Consejo de RTVE con el cargo de Consejero de Salud del Gobierno de Navarra. Se incorporó al Ejecutivo autonómico en septiembre de 1996 y se mantuvo en él hasta junio de 2003. A continuación se trasladó a Madrid de la mano de Ana Pastor, una de las personas de máxima confianza de Rajoy y entonces ministra de Sanidad a las órdenes de Aznar.

Cervera fue nombrado director del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares. Cervera era ya entonces un valor en alza para los dirigentes del PP. De hecho, numerosos rumores apuntaban a su nombramiento como ministro de Sanidad en el caso de que Rajoy hubiera ganado las elecciones del 14 de mazo de 2004.

Su mejor año, en lo político y en lo personal, tardaría en llegar. 2008 es un periodo clave en su vida. Como ya se apuntó, fue entonces cuando se casó y la ruptura entre UPN y el PP de Navarra supuso una oportunidad de oro para ganar enteros ante Rajoy, entonces líder de la oposición. El líder del Partido Popular le puso al frente de la formación en Navarrra.

Fue confirmado en el cargo el 12 de noviembre de 2009, cuando fue elegido presidente del PPN con el 92% de los votos en unas elecciones internas en las que él fue el único aspirante. En mayo de 2011 fue candidato de los populares a la presidencia de Navarra. El PP fue la quinta fuerza más votada, obteniendo 4 escaños.

Meses después volvería al Congreso de los Diputados, que había dejado para encabezar la lista electoral de su partido en las autonómicas navarras. En esta ocasión, no se presentó por Navarra sino por Madrid. Hay quien apunta a que esto se debe a que desde UPN se impuso la condición de que no fuera candidato por la comunidad foral para poder llegar a un acuerdo electoral.

Quienes le tratan le describen como una «personalidad compleja». Dicen de él que es extremadamente tímido, muy hábil en la política de despachos pero poco dado a tratarse con los afiliados en una región donde es fundamental participar en todo tipo de encuentros en los pueblos y que le gusta ir ‘por libre’.

Fuentes políticas que se muestran convencidas de de que ha sido víctima de una trampa, dicen que quien la diseñó debe de conocerle bien. Explican que le gusta tomar decisiones por cuenta propia sin consultar a sus compañeros de partido ni a los altos cargos del mismo, que le habrían desaconsejado ir a la ya tristemente célebre muralla de Pamplona.

Todas las fuentes consultadas por Periodista Digital destacan que su personalidad, que según los relatos oscila entre la timidez y la prepotencia, le ha valido ganarse numerosos enemigos. Además, explican, no tiene apenas amigos.

Alguno de sus enemigos, según dicen, podría haber diseñado un plan teniendo en cuenta que es el único político destacado de la Comunidad Foral que ha sido muy crítico con gran parte de los gestores de la Caja Navarra. Con este dato, señalan, era previsible que cayera en la tentación de ir a buscar una posible documentación comprometedora sobre la cúpula de la entidad sin antes consultarlo a nadie. Este «individualismo extremo» y el afán de lograr un éxito en su personal batalla contra la entidad financiera han sido su perdición, destacan.

 

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Autor

Antonio Chinchetru

Licenciado en Periodismo y tiene la acreditación de suficiencia investigadora (actual DEA) en Sociología y Opinión Pública

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