La situación de Mariano Rajoy es paradójica: es el presidente del Gobierno con mayor poder real de la historia constitucional y, al tiempo, es el que tiene menos apoyo popular y más baja estimación de voto de todos, a solo un año de su llegada a La Moncloa.
En esta situación debe afrontar el 2013 que arranca con los retos más enormes a los que ha tenido que hacer frente un jefe del Ejecutivo en España: la crisis económica y el desafío soberanista de Cataluña, combinados con notables crisis institucionales y políticas.
La estimación de voto del PP ha caído casi 15 puntos desde las pasadas elecciones generales y se sitúa en el 29,8 por ciento, mientras que en el caso del PSOE el descenso se cifra en 5,4 puntos, hasta el 23,3 por ciento.
Según un sondeo de Metroscopia que publica este 13 de enero de 2013 el diario ‘El País’, realizado sobre una muestra de mil personas por medio de entrevistas telefónicas entre el 9 y 10 de enero, Izquierda Unida sube casi 9 puntos y llega al 15,6 por ciento de los votos, mientras que el partido que lidera Rosa Díez, Unión Progreso y Democracia (UPyD), obtendría el 10,1 por ciento de los votos.
LA VENTAJA DE RAJOY
La ventaja de Rajoy con este panorama y en un momento tan crítico es que no hay elecciones a la vista hasta las europeas de 2014. Y su evidente fortaleza está en que mantiene su apabullante mayoría absoluta en las Cortes y el control de los principales ayuntamientos y casi todas las comunidades.
También tiene su fortaleza en la debilidad del adversario, porque el PSOE ha mejorado ligeramente respecto al anterior sondeo, pero está en el 23,3% de los votos (5,4 puntos menos que el último resultado en generales).
LOS MALES DE RUBALCABA
En cuanto a la percepción de los líderes políticos, el sondeo pone de manifiesto la escasa confianza de los encuestados hacia el secretario general del PSOE, que al 91 por ciento le inspira poca o ninguna confianza, y hacia el presidente del Gobierno -84 por ciento-, en tanto que Rosa Díez es la mejor valorada entre los líderes de los principales partidos.
Afirma Fernando Garea, en el análisis que hace de la encuesta para el diario del Grupo PRISA, que la debilidad de Rajoy es la de su pérdida acelerada de respaldo ciudadano, con la fidelidad de voto del PP más baja de hace más de diez años, que le lleva a que solo un 45% de sus votantes esté dispuesto a repetir en este momento.
«Su debilidad es también su pésima valoración entre los españoles, ganada con esmero en solo 12 meses. Rajoy nunca fue un político carismático o especialmente bien valorado por los ciudadanos, pero ahora es el presidente más rechazado y a un 84% de los encuestados no le inspira confianza. Ni siquiera a él parece importarle cuando admite abiertamente que ha incumplido su programa y sus compromisos».
LA VALORACIÓN DE LOS MINISTROS
El ministro peor valorado es el de Educación, José Ignacio Wert, seguido de la titular de Empleo, Fátima Báñez; Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, mientras que la ministra de Fomento, Ana Pastor, y la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, son las mejor valoradas del Ejecutivo.
En cualquier caso, por el momento no hay visos de cambios en el Gobierno, salvo que Rajoy quiera sacar a Javier Arenas de la sombra.