Sigfrid Soria, miembro del PP canario, ha revolucionado la Red, tras publicar en su cuenta personal de Twitter:
Eso sí, como un perroflauta me acose por la calle, me intimide o me agreda, la ostia que se lleva ni se la va a creer
Así de contundente se mostraba el ‘popular’, que fue diputado en la pasada legislatura en Canarias, en referencia a uno de los temas de moda: el escrache. Su verborrea le han convertido en Trending Topic (tema del momento):
¿Finalmente veremos un linchamiento real por parte de una turba violenta y antidemocrática (escracheadores)? STOP PERROFLAUTAS
Los nazis pintaban la Estrella de David en las fachadas de las puertas de los Judíos. Los perroflautas usan pegatinas
Y digo más…, si algún perroflauta agrediera a alguna de mis hijas…, LE ARRANCO LA CABEZA. Y ahora, seguid vomitando barbaridades
Este jueves 11 de abril de 2013 Soria ha pasado por los micrófonos de la SER, en el programa matinal ‘Hoy por hoy’ con Gemma Nierga y Pepa Bueno para ratificarse de lo escrito en su Twitter:
Me extraña el revuelo que se ha armado por proclamar mi legítimo derecho a la defensa como lo tenemos todos los españoles. Me ratifico absolutamente en todos mis ‘tuits’, si alguien de mi familia es agredida responderé proporcionalmente y si esa respuesta tuviera que ser una ostia es una ostia y no nos escandalicemos.
Bueno intervino para matizarle que el debate venía dado por el tono violento de un «representante público» y recalcar que en los escraches aún no se había producido una «agresión física» contra nadie.
Soria: Entiendo que proclamar un derecho legítimo no debe nunca interpretarse como una amenaza. Si soy agredido proporcionalmente responderé, sin duda alguna. Hay dirigentes o ex dirigentes como González y Elena Valenciano, no de mi partido, que se han pronunciado al respecto. […] Yo se que esto alimenta para la polémica…
Gemma Nierga: Lo que usted defiende es que tomarse la justicia por su mano
Soria: El ejercicio de la legítima defensa no es tomarse la justicia por su mano. Hablemos con propiedad. Es un derecho y como tal lo puede ejercer cualquier español
Gemma Nierga: Aunque eso suponga usar la violencia
Soria: Yo tengo el derecho a responder
Pepa Bueno: Pero es que no se ha producido ningún hecho violento. El hecho violento no se ha producido. ¿Tiene usted alguna experiencia personal?
Soria: No voy a dar explicaciones de mi vida privada. Si llega el momento de sufrir una violencia física llegará el momento de responder…
Gemma Nierga: En uno de sus primeros mensajes usted no habla de violencia física, dice que si algún perroflauta le acosa por la calle, le intimide
Soria: Siga leyendo, por favor
Gemma Nierga: …me acose o agreda la ostia que se lleva ni se lo va a creer. ¿Si alguien le acosa también le suelta una ostia?
Soria: Si alguien me agrede se llevará una ostia
El actor Juan Diego Botto que era el invitado de esta mañana en el estudio quiso sumarse a la entrevista y preguntar él también:
Juan Diego Botto: Simplemente quería comentar que este tipo de comentarios pauperizan el debate. Situarlo al nivel del ojo por ojo…que parece una película del oeste. Lo de los desahucios es demasiado serio para someterlo a este nivel. La PAH no ha utilizado un lenguaje tan violento como el suyo. Creo que no corresponde situar el debate ahí. Respeto su opinión
Gemma Nierga aprovechó para dar paso a la lectura de los mensajes que por Twitter se estaban sucediendo
Soria: Me adhiero al padecer de todos los que estén bajo una situación de desahucio pero…
Botto: ¿Está a favor de la dación en pago?
Soria: Déjeme terminar. Se ha referido al drama humano y hay que intentar solucionarlo o paliarlo pero de ahí a que este drama genere otros dramas va una distancia muy grande. Y yo con mis ‘tuits’ proclamo el derecho a la legítima defensa
Un oyente había preguntado precisamente que en qué ley estaba contemplado el derecho a la legítima defensa, cuestión que retomó Nierga tras finalizar Soria, pero en ese momento la comunicación se cortó:
Gemma Nierga: Se nos ha cortado…o ha colgado directamente. Os informo que el señor Soria no nos vuelve a coger el teléfono. El debate tendrá que terminar aquí porque ha decidido cortar unilateralmente la conversación, o eso parece.