España sigue exportando a sus mentes más brilantes. El actor Willy Toledo se va a vivir a Cuba. Así lo anunció en una entrevista concedida a la cadena venezolana TeleSUR, donde afirmó que «a partir de mayo me iré a vivir a La Habana».
Como la utopía es una bacteria resistente, el ejemplo vivo de lo que en los años ’90 Plinio Apuleyo Mendoza, Carlos Alberto Montaner y Álvaro Vargas Llosa describieron como el ‘perfecto idiota latinoamericano’ se va al paraíso de la revolución comunista para abominar del consumismo luego de haberse embolsado 240.000 euros en subvenciones y ayudas durante el último Gobierno socialista.
Según él, «hay millones de personas que apoyan la revolución cubana, especialmente los pueblos pobres», ya que fue un movimiento «en contra de una dictadura salvaje y que ha conseguido unos mínimos de educación, salud, vivienda, cultura…».
«La revolución ha mejorado la vida de los cubanos»
Willy viaja a preconizar la ‘vanguardia revolucionaria’, la magia tribal marxista para dar guía espiritual a las masas tercermundistas despistadas. El líder de la tribu indignada viaja a Cuba a intepretar las leyes de la historia y ayudarlos a emprender el viaje hacia la sociedad sin clases al grito de ¡expropiése!.
Willy considera que la «gente de izquierdas» está obligada a «apoyar sin fisuras a Cuba», ya que «somos los que aspiramos a una sociedad mejor». Ya lo avisaron los autores del Manual del Perfecto Idiota Latinoamericano: «La relación sentimental más íntima y durarera del idiota es con la revolución cubana».
Sobre España, Toledo aseguró que la gente «se está dando cuenta de que no vivimos en una democracia», mientras que calificó al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de «fascista». Como dijo alguien en Twitter, con la salida de Willy en España ya vuelve a haber lugar para un tonto más.