La declaración comenzó con retraso porque el fiscal estaba ocupado
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha negado este miércoles 14 agosto 2013 ante el juez Pablo Ruz la existencia de una caja B en el partido, que haya percibido sobresueldos en negro y, al igual que aseguraron el día anterior sus antecesores Javier Arenas y Francisco Álvarez-Cascos, ha explicado que el control de las donaciones corresponde al tesorero.
Cospedal, que ha declarado como testigo durante dos horas y media, ha negado también haber intervenido en las condiciones de salida del PP del extesorero Luis Bárcenas y sobre las donaciones ha dicho también que le extrañaría que hubiera un registro de los DNI de los donantes, aunque ha matizado que ese control de las donaciones lo haría la Tesorería, según fuentes de la acusación.
Por lo que no ha podido ser interrogada –por afectar a aforados que deberían responder ante otra jurisdicción distinta a la Audiencia Nacional– es por el pago de 200.000 euros supuestamente entregado por el expresidente de Sacyr Luis del Rivero al PP de Castilla-La Mancha para la campaña de Cospedal tras haber obtenido una filial de dicha empresa, Sufi, una contrata de limpieza en el Ayuntamiento de Toledo.
LLEGADA A LA AUDIENCIA NACIONAL
Cospedal ha llegado a las 9.30 horas a la Audiencia Nacional, donde declarará como testigo ante el juez Pablo Ruz por la contabilidad B del PP. La dirigente ‘popular’ ha llegado media hora antes de la hora a la que había sido convocada, a bordo de un coche oscuro que la ha dejado a la puerta del tribunal. Pese a que los periodistas apostados en la zona reclamaban su atención, ella ha entrado en el edificio girándose levemente, pero sin responder a la prensa.
A su llegada a la Audiencia se ha producido un cruce de gritos entre dos grupos que aguardaban la llegada de la secretaria general del PP. Por un lado un grupo de jóvenes simpatizantes que le han lanzado gritos de apoyo, uno de ellos con un megáfono en mano. Enfrente, un grupo de ‘preferentistas’ que, al igual que hicieron ayer con Javier Arenas y Francisco Álvarez-Cascos, le han dedicado insultos y abucheos.
Agentes de la Policía Nacional han separado a los dos grupos por medio de vallas y sus consignas han sonado al mismo tiempo cuando la secretaria general del PP accedía a la Audiencia Nacional. Desde primera hora de la mañana, un fuerte dispositivo policial compuesto por una decena de furgones blindados y más de una veintena de efectivos rodea el perímetro de la sede de la Audiencia Nacional.
«Gobierno dimisión», «Corruptos a prisión», «Esto nos pasa por un Gobierno facha» y «Dónde están, no se ven, los esbirros del PP», han sido algunos de los coros de los afectados por las preferentes. En algunos de los carteles que portaban se podía leer «Santa Cospedal a sus fieles da el don de robar», «Bankia engaña, arbitraje mentira, canje estafa, devolución ya», «Cospedal dimisión» o «¿Dónde están mis ahorros? Estafados por las preferentes».
Casi una hora antes de la declaración, frente a la puerta de la sede judicial se encontraban ya más de una decena de cámaras de televisión y numerosos periodistas, mientas que un grupo de casi medio centenar de afectados por las preferentes de Bankia se concentraban en el paseo de Recoletos de Madrid después de que los agentes les impidieran subir por Prim para situarse frente a la puerta de entrada de los juzgados.
La declaración de Cospedal ha comenzado a las 10.45 horas, pese a estar prevista para las 10.00, un retraso debido a que el fiscal, Antonio Romeral, ha tenido que estar presente en una comarecencia relacionada con una orden de entrega internacional.
Ronda de declaraciones
Cospedal declara ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz en la causa que instruye el magistrado sobre la posible contabilidad b del PP, tras haberlo hecho este martes sus antecesores en el cargo, Francisco Álvarez-Cascos y Javier Arenas, todos ellos llamados en calidad de testigos para que expliquen sus conocimientos sobre la contabilidad del partido tras los llamados ‘papeles de Bárcenas’.
Ruz concretaba en su auto de citación que aunque los cargos de Arenas y Álvarez-Cascos se corresponden con periodos anteriores al que delimita el objeto de la instrucción, cree que pueden aportar «datos relevantes» para la investigación en curso.
No obstante, el magistrado ha venido delimitando en sus últimos autos la investigación a los delitos fiscales que pudieran haberse cometido a partir del ejercicio 2007 y los cometidos contra la administración pública, como cohecho y otros, desde el año 2002 en adelante.
Por lo que se refiere a De Cospedal, además de ser preguntada por su conocimiento general de la supuesta contabilidad B, previsiblemente será inquirida por lo señalado por Bárcenas respecto del cobro en concepto de sobresueldo, tanto por ella como por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de 45.000 euros cada uno entre los años 2009 y 2010.
Pese a carecer de recibos que demuestren estos pagos, Bárcenas aseguró que el primero de los pagos se realizó tras el inicio del ‘caso Gürtel’, momento en que el partido decidió liquidar la caja donde guardaba el dinero en efectivo procedente de los pagos realizados por distintos empresarios.
Bárcenas señaló también en dicho interrogatorio que en la caja había depositados en 2009 más de 40.000 euros y que repartió la cantidad en dos partes, que dio a Rajoy y Cospedal.
El excedente de dinero sobrante tras el reparto fue adjudicado también al presidente del Gobierno. Agregó que en 2010 pagó otros 25.000 euros a cada uno de los dos dirigentes populares, en esta ocasión en efectivo. El dinero, según la versión de Bárcenas, fue entregado en mano en billetes de 500 euros introducidos en sobres marrones.
Cospedal habría recibido esta última cantidad en su despacho de Génova. Los 50.000 euros repartidos procedían de la devolución de un préstamo realizado al PP gallego.
Prevención como testigo
La cuestión que puede dar más problemas a Cospedal es la referida al recibí aportado por Bárcenas por el presunto cobro en 2007 por el PP de Castilla-La Mancha de una comisión de 200.000 euros a cambio de la adjudicación de una contrata municipal en el Ayuntamiento de Toledo, siendo presidenta del partido en la región la propia De Cospedal.
Fuentes jurídicas consultadas señalan que puede que en este punto el juez Ruz advierta a la testigo -que como tal acude sin abogado y con obligación de decir verdad-, de la posibilidad de que una respuesta en este punto pueda perjudicarla y que sería mejor no contestar.
Cospedal está citada a las 10 de la mañana y será la única en testificar. Este martes, Arenas y Álvarez Cascos han dado explicaciones durante unas dos horas cada uno, en una intensa jornada en la Audiencia que se ha completado con las declaraciones también del cajero Antonio Ortiz y de Cristóbal Páez, quien sustituyera a Luis Bárcenas en la gerencia del partido.