Wert parecía más listo antes de ser ministro que ahora; parece que no da una, que cada vez que hace algo se equivoca
La última piedra en el camino independentista de Artur Mas la ha puesto Rajoy, afirmando tajante que mientras él sea presidente no se celebrará el referéndum.
José Bono, expresidente de Castilla-La Mancha y del Congreso de los Diputados, viejo socialista y firme defensor de la unidad española, acudió este 25 de enero de 2014 al plató de laSexta noche y dejó clara su postura:
«En Cataluña se está produciendo por parte de los secesionistas un agravio victimista. Se dice y se explica a los niños que España es una madrastra y que España les roba. Basta ya de victimismo».
«Las víctimas son los parados, los pobres, los desheredados; y estos están en todas partes».
Hijo de falangista, José Bono iba para cura, pero decidió entrar en política, y lo hizo joven, en unos años:
«Yo entré en política cuando no tenía cerca ser ministro, ni ser alcalde, ni ser presidente autonómico, lo único que tenía cerca era la cárcel por ser socialista y por luchar contra Franco».
En un alarga entrevista con Iñaki López, el siempre brillante José Bono hablo de casi todo lo divino y humno y dejó frases para el mármol:
«A mí me interesa mucho más mi país que mi partido, aunque soy también patriota de mi partido», comenzó afirmando, antes de añadir que le «agradaría que le fuera bien a quien le va mal».
«Tenemos un millón de personas menos cotizando a la Seguridad Social que hace dos años. Los años de Zapatero fueron durísimos, pero es que como con Rajoy no podemos seguir».
Bono no se quedó en la crítica o la melancolía. A pesar de subrayar que no está en batalla política alguna, ni siquiera las de las primarias del PSOE, propuso sus soluciones:
«PSOE y PP deben llegar a acuerdos para resolver los problemas. El peor problema de España es la gente que lo está pasando mal, la que no sale a la calle porque no tiene ningún dinero para ello».
«Tenemos las instituciones con peor prestigio desde que murió Franco. Lo mismo da que se sea de derecha que de izquierda: la ciudadanía ve que todos son iguales. Y aunque no lo sean, así no se puede seguir».
Afirmó Bono sentirse soprendido por algunas noticias:
«Vómo estará la gente de harta y desprotegida para llegar hasta sucesos como los de Gamonal, en Burgos. Cuando dicen que no poder llegar a fin de mes es violencia, llevan razón».
Repartió también estopa, aunque muy poca a los suyos -si se exceptúa las dudas que dejó en el aire sobre el sistema d eprimarias- y mucha a los populares:
«Wert parecía más listo antes de ser ministro que ahora. Parece que no da una, que cada vez que hace algo se equivoca. Los recortes en educación tienen sus defectos, y él estaría más feliz dimitiendo y dejando un ministerio en el que ha acreditado que no es querido».
«El problema de los políticos es que no tienen independencia política. Los ciudadanos no eligen a los políticos. Tenemos una ley electoral diabólica, y hay que derogarla. Favorece que haya políticos que sólo quieran dar gusto al jefe».
En cuanto a la Infanta, advirtió:
«Es muy poco importante cómo entre en el juzgado, lo importante es cómo salga y le recomienda que acerque sus posturas a las de su padre para mejorar su imagen».
Sobre el aborto y la ley que impulsa el ministro Ruiz Gallardón, con enorma controversia y descomunal oposición, el sibilino Bono recurrió a un consejo de Baltasar Gracián para expresar su opinión sobre el ministro de Justicia y su proyecto:
«Es prudente resolver los problemas que llegan a tu casa, pero no es prudente salir mitad de la calle a buscarse problemas».
