Unos miles de votos a partidos pequeños pueden alterar el reparto entre populares y socialistas
Desde las elecciones de 2008, en las que hubo algo de emoción hasta el final, ninguna campaña había cerrado con una incógnita tan grande sobre el resultado como la de las europeas.
Todos los partidos políticos echaron el resto anoche con mítines multitudinarios, pese a la escasa movilización que ha dominado estas dos semanas, pero hay muchas más dudas que certezas.
Los socialistas dicen que no han hecho encuestas propias, «por escasez de fondos». Los populares se han hartado de hacer tracking diarios y no lo tienen muy claro.
Se impone la tesis de que ganarán, pero por un margen pequeño y llegando por los pelos a los 19 escaños en el Parlamento Europeo.
El PSOE se quedaría en 17 europarlamentarios. Lo de Izquierda Unida, que puede quedarse en cinco, tampoco parece que vaya a ser muy lucido, porque le han comido terreno por su izquierda los extraconstitucionales como ‘Podemos’, que podría llegar a dos escaños.
UPyD subiría hasta 4 escaños y Ciudadanos acaricia los dos escaños.
Pedro Arriola, el gurú de Rajoy, como siempre prudente, apuesta internamente por la victoria ajustada del PP pero con dudas.
EL EFECTO RAJOY
Con el presidente Rajoy, María Dolores Cospedal y el resto metidos hasta el corvejón en la batalla, para compensar la ‘pifia‘ Arias Cañete,los populares se han crecido para cerrar la campaña y se han mostrado convencidos de que el domingo volverán a ser el partido más votado en España.
«Volvemos a ser los alemanes del sur», presumió el ‘número uno’ de la lista del PP, Miguel Arias Cañete, en el mitin final bajo la atenta mirada del presidente, Mariano Rajoy, que minutos después cerró pidiendo el voto para su partido porque «lo peor ha pasado y lo peor que le puede ocurrir al país es volver a las superadas políticas socialistas».
El presidente del Gobierno docilitó por última vez el voto para el PP este domingo porque «las cosas han cambiado mucho y para bien» en España en los últimos dos años y este esfuerzo no se puede «tirar por la borda«.
El presidente ha vuelto a sacar pecho por la mejora económica y, especialmente, por haber evitado el rescate.
«Este país evitó el rescate porque tuvo aguante y paciencia y el tesón y el coraje y no aceptó las presiones que de todo tipo y desde todas partes se le hicieron al Gobierno de España».
Ha subrayado que empiezan a crecer la economía, el empleo y la recaudación.
«Los españoles necesitan después de muchos años de crisis económica que les den buenas noticias y que además son verdad».
«Vamos a ganar las elecciones el próximo domingo, no os quepa la más mínima duda», ha dicho Rajoy ante más de 2.200 personas, a las que ha asegurado que los populares están para garantizar el progreso, la unidad y el sistema de bienestar.
«Esto es lo que se juega el próximo domingo».
«LA MAYOR DIFICULTAD DE UN PUEBLO: EL SOCIALISMO»
Durante su intervención, un Cañete todavía no recuperado de su desastroso debate con Elena Valenciano arremetió duramente contra las políticas del PSOE y ha defendido la capacidad de los populares para defender a España, que ha superado dos veces -ha dicho- «la mayor dificultad que puede superar un pueblo: el socialismo».
«Los sacrificios de los españoles han merecido la pena como han demostrado las políticas del presidente del Gobierno, gracias a las que ha vuelto el crecimiento económico y el empleo».
«Volvemos a ser los alemanes del sur».
Cañete ha apelado a «olvidar» a los que negaron siempre la crisis y ahora «mienten una vez más, cuando se empieza a generar empleo, y niegan la esperanza a los españoles».
«Hay que dar una lección a los socialistas el domingo porque no es el momento de castigar a un Gobierno que lleva a España por el buen camino».
El candidato del PP ha criticado también a la cabeza de lista del PSOE, Elena Valenciano, y ha dicho que, en contra de lo que hace la dirigente socialista, el PP nunca ocultará la bandera de España, sino que paseará orgulloso con ella por Europa porque es la de todas las comunidades.
«La que nos une y nos hace superar las mayores dificultades, incluso la mayor que puede superar un pueblo, el socialismo».
