Decir una cosa y hacer la contraria forma parte del ADN de Podemos
A la rasputín de Podemos, Carolina Bescansa, le han preguntado sobre la acusación de Patxi López a Iglesias de hacer «loas a ETA» mientras asesinaban a gente del PSOE.
En su habitual tono cansino Bescansa ha lamentado que se haga electoralismo con el terrorismo: «En el País Vasco hay heridas que están cicatrizando y curando». No será gracias a ellos: Iglesias ha decidido dejar plantado a su partido en Bilbao a cambio de ir a laSexta.
Lo cierto es que a sus líderes siempre se las ha visto muy cómodos en herriko tabernas de la mano de diputados de Amaiur. Allí fue donde Iglesias elogió a Sabino Cuadra como «ese diputado del pueblo», tan cercano al pueblo que los beneficios de su libro no los dedica a los huérfanos de ETA sino a sus asesinos. —Pablo Iglesias se derrite en elogios a Amaiur y ETA por cuestionar «el papelito aquel del 78»—
Y a Juan Carlos Monedero lo hemos visto abrazado a su amigo del rapero Pablo Hasel, condenado por enaltecer a ETA y Al Qaeda. —Pablo Hasel, el rapero al que se abrazaba Monedero, cantaba claro: «Sueño con que Juan Carlos vuele por los aires»—
La sintonía de Podemos con los proetarras no ha impedido que su fichaje estrella, el exJemad Julio Rodríguez se presenta como un «patriota» ante un abarrotado Pabellón Príncipe Felipe en Zaragoza.
El general de Podemos, que no tiene asegurado su escaño en el Congreso según el CIS, no tiene feeling con la militancia podemita, que le ve como un elemento extraño en sus filas pese a los esfuerzos de militar por repetir como un robocop los eslóganes del partido que le pasan sus asesores de campaña.
ALMÍBAR EN PODEMOS, TANIA SE AGRIA
Podemos se dulcifica. Pablo Iglesias predica que «la ternura es la llave del cambio». El sirope electoral lo remata el responsable de Relaciones con la Sociedad Civil del partido, Rafael Mayoral: «El amor es el principal motor de nuestra acción política». No apto para diabéticos.
Decir una cosa y hacer la contraria forma parte del ADN de Podemos. Su máxima expresión es la excandidata de IU a la Comunidad de Madrid, Tania Sánchez, la del tajante ‘no vamos a entrar en Podemos. Punto».
Por más que se empeña en justificarse ahora dicendo que no milita en el partido, Sánchez es una de las que comparten búnker con el núcleo duro podemita. Y todo gracias a que su ex pareja modificó los estatutos para meterla con calzador en la formación de la que dijo que nunca iría. —Los estatutos de Podemos abren la puerta a concurrir en las autonómicas en candidaturas de «unidad popular»—
En una entrevista en el digital de Escolar se enfada cuando le preguntan si se desenvuelve con menos soltura con los periodistas que hace un año. «¿Menos frescura? Eso lo dices tú», afirma clavándole una sonrisa malévola al periodista «Os tengo más miedo. A mí me han hecho polvo», afirma la que dijo que «no sabía» que su hermano era administrador de la empresa contratada a la que benefició el Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid cuando ella era concejala.
Su hermano se hace de oro gracias a favores políticos y la culpa es de los periodistas que lo denuncian. Pobre Tania. No es fácil pasar de ser la reina de las tertulias a maniquí en los mítines de Podemos. Punto.
@lbalcarce