Pablo Iglesias reniega ahora de Venezuela. Al ser preguntado por el diario ABC en una entrevista si se arrepentía de sus vínculos con los gobiernos de Venezuela, el líder de Podemos se ha marcado un ‘quita de ahí esa pajas’ y ha respondido:
-Yo en Venezuela he estado un mes y medio en toda mi vida. Hemos trabajado por defender políticas públicas que se parecieran a las de España. Eso es lo que hemos hecho nosotros en todas partes y creo que está bien.
Es su nuevo discurso acorde con su versión Dalai Lama en toda una operación por ocultar su pasado bolivariano. Lo que no le ha impedido tacha al opositor al régimen Leopoldo López de «extremista» ni de negar las acusaciones de Felipe González de que algunos líderes de Podemos hicieron en el pasado escuchas ilegales a la oposición en Venezuela.
A pocos días del 20-D los podemitas se huyen del régimen chavista al que asesoraron como de la lepra. Régimen del que cobraron ingentes cantidades de dinero para conseguir expandir la franquicia chavista en España.
«Qué envidia de los españoles que viven en Venezuela, es un ejemplo democrático», era lo que decía Iglesias cuando él y los suyos eran patrocinados por los bolivarianos con suculentas transferencias de dinero a las cuentas de Juan Carlos Monedero, asesor personal de Chávez y fundador de Podemos. Ahora toca enterrar el pasado a costa de la mentira y el engaño. Por suerte queda YouTube para desmentirles.