Juan Carlos Monedero no habrá cometido irregularidades y explicará en breve los cobros recibidos por su asesoramiento internacional. Pero la candidata de Podemos a la Junta de Andalucía, Teresa Rodríguez, no quiere verle durante una campaña electoral tan sensible como la andaluza. Algo con lo que la dirección nacional ha estado de acuerdo.
Pese a negar que Monedero haya rebajado sus intervenciones o esté apartado de la primera línea, la decisión de que el secretario de Proceso Constituyente y Programa no esté presente en la campaña andaluza, primer gran duelo nacional de Podemos, no contribuye a reafirmar la postura oficial del partido respecto a su dirigente. Más bien todo lo contrario: Monedero parece lastrar a Podemos mientras no dé explicaciones.
El tridente conformado por Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero e Iñigo Errejón quedará cojo, según las informaciones que proporcionó el partido en Andalucía a los medios. Tan sólo Iglesias y Errejón -que supervisa la campaña andaluza de Rodríguez que dirige Sergio Pascual, secretario de Organización a nivel estatal- tomarán parte en ella.
Monedero se queda fuera, salvo cambios de última hora, y dentro de Podemos no se escapa el hecho de que Rodríguez le largó un rejón el pasado fin de semana en una entrevista en El Mundo.
Si la candidata podemita en Andalucía ha hecho suya la versión de que la formación está siendo escrutada en el marco de una campaña de amedrentamiento, no es menos cierto que clamó por el hecho de que resulta difícil explicar ciertas cosas a los ciudadanos si algunos dentro del partido tampoco las tienen claras.
Además, Rodríguez también le devolvería así a Monedero las críticas del pasado verano, cuando acusó a Izquierda Anticapitalista -en la que militaba, entonces como partido y ahora como asociación, la candidata- de estar llevando a cabo una labor de zapa dentro de Podemos.