El líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, comparecía en la sede electoral de la coalición Unidad Popular con semblante serio, aunque sacando pecho de los resultados obtenidos.
Aseguraba Garzón a sus fieles que:
Quiero lanzar un mensaje de optimismo. Estamos ante un ciclo electoral que se cierra con algo positivo, la no existencia de mayoría absoluta del PP. Vamos al Parlamento más fragmentado. Una perspectiva más favorable porque ya no es el rodillo del PP, ahora habrá que negociar todo.
También apuntó los aspectos negativos:
Nos propusimos tener un grupo parlamentario propio y no lo hemos conseguido. No hemos conseguido romper del todo el bipartidismo y que haya un giro a la izquierda donde se apueste por las políticas sociales.
Y denunció que:
Hemos hecho una campaña de la que podemos estar muy orgullosos. Hemos enfrentado muchos palos en las ruedas, muchas zancadillas. Y pese a todo somos la quinta fuerza en número de votos, aunque es verdad que cada escaño nos ha costado 400.000 votos, por los 60.000 a otros partidos.
