Su propuesta es que en torno a esa mesa se reúnan equipos de negociación de los distintos partidos, no sus líderes, porque quiere hablar de políticas y no de "sillones" o puestos
Albert Rivera llamó por teléfono en la noche del lunes 27 de junio de 2016 a Mariano Rajoy y a Pedro Sánchez, para trasladarles su propuesta de crear una mesa de negociación entre los tres partidos que «aborde las reformas necesarias que necesita España» (Jordi Évole: «Podemos ha jugado a lo que no sabe»).
La respuesta ha sido decepcionante, porque ninguno de los dos, ni el líder del triunfante PP ni el del menguante PSOE, respaldó esta vía (El PSOE asegura que no apoyará ni se abstendrá en la investidura de Mariano Rajoy).
Según han informado fuentes de Ciudadanos, su presidente transmitió a ambos dirigentes políticos un mensaje claro:
«Es necesario que en España haya un gobierno estable, constitucionalista y con mayoría suficiente para abordar los cambios legislativos que permitan a España avanzar hacia una nueva etapa política» (El barón socialista Fernández Vara dice que Rajoy debe formar gobierno y el PSOE irse a la oposición ).
Rajoy se limitió a dar educadamente las gracias y a trasladarle su intención de abrir una ronda de diálogo con todos los partidos en los próximos días.
Sánchez insistió en que es al PP a quien corresponde tomar la iniciativa para la formación de gobierno (Mariano Rajoy tiene ya su fórmula de gobierno y hablará primero con el PSOE).
Pese a ello, Rivera les comunicó que sigue dispuesto a conformar esa mesa entre los tres partidos constitucionalistas a pesar de la estrategia de PP y PSOE (La sonrisa de Podemos se vuelve llanto con el mayor fracaso electoral del 26-J ).
El líder de Ciudadanos explicó este lunes que su propuesta es que en torno a esa mesa se reúnan equipos de negociación de los distintos partidos, no sus líderes, porque quiere hablar de políticas y no de «sillones» o puestos.
No obstante, admitió que puede haber primero una reunión de líderes para desbloquear esta vía y nombrar equipos negociadores (La ‘Noche Triste’ de los de Podemos, que se quedan sin sonrisa y con cara de tontos).
