Rajoy y Rivera volverán a verse la semana que viene. Los populares piensan que un sí de Ciudadanos "acercaría la abstención del PSOE"
Mariano Rajoy entra en agosto, tras reunirse con Pedro Sánchez y Albert Rivera, sin despejar la incógnita de si se presentará finalmente a la investidura si no ata los votos necesarios para ser elegido presidente (Las 4 razones de Mariano Rajoy para el optimismo).
Hasta el momento solo tiene los 137 de su grupo parlamentario. Ese número es insuficiente para lograr la mayoría absoluta necesaria en la primera votación -176 de los 350 diputados- (Sánchez y Rivera secuestran España).
En caso de fallar, habría otro segundo intento 48 horas más tarde en el que le valdría la mayoría simple -más síes que noes-. Tampoco le salen las cuentas (Rivera se escuda en el PSOE y no cambia su abstención: ¿elecciones a la vuelta de la esquina?).
ZAPATERO SACA LA CABEZA
El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha advertido este jueves de que sería «negativo e inconveniente» que se tuvieran celebrar nuevas elecciones y, tras apelar al PP a hacer todos los esfuerzos posibles como fuerza mayoritaria, ha abogado por abrir un proceso de diálogo interno en el PSOE.
¿Y SI NADIE SE MUEVE?
Las posiciones oficiales de los partidos siguen siendo las mismas tras las reuniones. Ciudadanos se abstendrá en la segunda votación para desbloquear la situación, en tanto que el PSOE sigue manteniendo su ‘no’. ¿Entonces?
Rajoy ha emprendido esta semana su operación «reblandecimiento» de C’s y del PSOE, según lo explica él tanto en público como en privado.
Su fórmula sería que los naranjas cambiaran al ‘sí’ y el PSOE pasara a la abstención presionado por las esferas política, social y económica.
El vicesecretario de comunicación del PP, Pablo Casado, ha celebrado este jueves «la química» que encontró ayer en la cita entre Mariano Rajoy y Albert Rivera.
El presidente en funciones llegó «contento» al comité de dirección del partido posterior a la reunión, que resumió como «un paso adelante», y ambos líderes volverán a verse la semana que viene.
«Rivera es una persona responsable con la que compartimos lo esencial y sería imposible no entendernos».
«Ojalá quisieran entrar en el Gobierno», ha añadido el portavoz popular.
El vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez-Maillo, también ha compartido ese entusiasmo, aunque contenido:
«Si dos interlocutores quieren negociar sobre los presupuestos es porque se piensa que va a haber un Gobierno».
Casado tampoco ha aclarado, en una entrevista en Antena 3, si el líder del PP les ha transmitido si irá a un debate de investidura en caso de no reunir los apoyos necesarios.
Rajoy se resiste a poner fecha para ese debate, pese a que tanto el PSOE como Ciudadanos le urgen a hacerlo tras recibir el encargo del Rey.
«A mí me gustaría que fuera en agosto y cuanto antes. Yo creo que la penúltima o incluso la última semana serían perfectas para la investidura, pero no depende solo de nosotros».
De momento, los socialistas mantienen su voto en contra y Ciudadanos, que no se moverá de la abstención.
Maillo ha admitido, en una entrevista en Telecinco, que están convencidos de que un voto a favor de Ciudadanos «acercaría la abstención del PSOE».
Casado ha asegurado que Rajoy ha aceptado el encargo del Rey y, por tanto, «su vocación es ir a una investidura con los votos suficientes para ser presidente del Gobierno», pero ha explicado que esa sesión no puede ser un acto de «desagravio», «para tener presencia» o un acto de «precampaña» de las elecciones vascas o gallegas.
Para Maillo, la única pretensión de Sánchez al urgir al líder del PP a fijar una fecha para el debate es que se produzca «una investidura fallida».
