Cuatro cargos de Podemos irían delante de Garzón en la lista
El líder de IU, Alberto Garzón, aseguró ayer que su posición en las listas de una posible confluencia entre su partido y Podemos era algo «secundario», dando a entender que aceptaría ir en quinto lugar por Madrid después de que Pablo Iglesias, que tiene asegurado el primer lugar, asegurase hace días que Íñigo Errejón repetiría en todo caso como número tres.
Según informa el diario La Vanguardia, Garzón habría dejado entrever así que rebaja sus exigencias después de que las semana pasada elevase la voz para exigir que su nombre esté en la lista por Madrid, descartando concurrir como cabeza de lista por otro circunscripción más minoritaria.
Un extremo este último que ya despertó ciertas discrepancias entre el líder de IU e Iglesias cuando antes del 20D se abordó una posible alianza y el líder de Podemos deslizó a su homólogo que fuese número uno por Málaga.
De este modo, la lista por Madrid de una posible confluencia entre Podemos e IU dejaría los cuatro primeros lugares al partido ‘morado’, mientras que IU dispondría del quinto en adelante, estando por detrás su líder de otros cuadros de Iglesias como el propio Errejón o las también diputadas tras el 20D Carolina Bescansa e Irene Montero, favorecidas en este caso por la fórmula cremallera.
Esta cesión de Garzón se produce al mismo tiempo que IU negocia con Podemos el cómo poder saldar la deuda de 16 millones que arrastra en sus cuentas.
Según informa el diario La Razón, el agujero es tal en las cuentas de la formación, que Garzón estaría priorizando el factor económico en las conversaciones que ya mantienen ambos partidos antes que el político, poniendo por caso su aceptación a no exigir un puesto más alto en la lista de Madrid.
Como recoge el citado diario, el Tribunal de Cuentas cifra en 14 millones de euros la deuda de IU, a la que se suman los dos millones de la campaña electoral del 20D. El hecho de aliarse con Podemos y conseguir el ansiado ‘sorpasso’ ante el PSOE sería una oportunidad de oro de la formación para sanear sus cuentas gracias a las mayores subvenciones que recibiría la coalición de ambos partidos.
Pese a todo, y aunque la relación entre Iglesias y Garzón se ha estrechado tras convivir estos meses en los pasillos del Congreso además de asumir ambos el consejo del histórico exlíder de IU Julio Anguita sobre la necesidad de presentarse juntos al 26J, las negociaciones entre ambos partidos no prometen ser fáciles, a tenor del secretismo con que las llevan, por parte de Podemos, Pablo Echenique, y por parte de IU, Adolfo Barrena.
Los términos económicos en el reparto de las futuras subvenciones, la volatilidad de las encuestas, que hablan de posible ‘sorpasso’ al PSOE, pero no por suficiente diferencia, y la colocación en las listas de cuadros de IU junto a cuadros de Podemos que, en su día renegaron de la formación de Garzón provocan que el plazo hasta la presentación definitiva de coaliciones el 12 de mayo y la presentación de las listas definitivas el 22 del mismo mes sea de gran presión para ambas formaciones.
