Dos días después de las elecciones generales, los ciudadanos volvían a exigir a los políticos que pongan fin al bloqueo político y reclaman que cumplan con la única misión que les encomendaron el pasado mes de diciembre y que, sin embargo, no fueron capaces de conseguir: ponerse de acuerdo.
Es lo que se desprende de la última encuesta de NC Report para LA RAZÓN -realizada entre el 28 de junio y el 2 de julio-, en la que los españoles muestran su descontento y hartazgo dejando claro que hay una urgencia manifiesta por poner fin a esta situación y que quien debe gobernar la lista más votada, en este caso, la del PP con sus 137 escaños.
Pese a esta exigencia a los políticos de entenderse para evitar otros seis meses de dudas y desgobierno, una gran mayoría de encuestados confía en que no volverá a haber una llamada a las urnas. Así piensan dos de cada tres ciudadanos (67,6 por ciento), frente a uno de cada cuatro (24,4 por ciento), que, por el contrario, es más pesimista y cree que sí que habrá terceras elecciones. Los más optimistas, los mayores de 45 años, mientras que los jóvenes de entre 18 a 29 son el grupo que descarta una investidura tras estos comicios.
Lo que sí que aseguran tajantes los españoles es que la formación de gobierno es algo «urgente» y hay un 86,2 por ciento de ellos que considera que no se puede esperar más. Frente a ellos, apenas un 10 por ciento cree que no hay ninguna urgencia y no verían raro ni mal repetir los comicios. Es una necesidad imperiosa, principalmente, para los mayores de 45 años y, de nuevo, la franja de electores con edades comprendidas entre los 18 y los 29 años es la que menos problemas vería si no se llega a un acuerdo.
Y la gran pregunta. ¿quién debería gobernar? Para un 64,1 por ciento (prácticamente dos de cada tres ciudadanos) ha de ser la lista más votada, representada tras el 26-J por el PP de Mariano Rajoy. Mientras, un 31,3 por ciento (casi uno de cada tres) cree que no es primordial que quien más apoyos ha cosechado sea quien dirija el Ejecutivo. La lista más votada es la opción preferida para los mayores de 45 años y, otra vez, son los más jóvenes los que no apoyan la opción mayoritaria.
Y esa candidatura que más votos y escaños recibió el domingo 26 de julio, la encabezada por el actual presidente en funciones, es la que ha de conseguir llegar a un acuerdo con el resto de formaciones para gobernar. Sin embargo, es en este punto en el que menos diferencias hay, pues mientras el 38,9 por ciento de los electores cree que Mariano Rajoy conseguirá finalmente formar gobierno y ser investido presidente, hay un 30,1 por ciento que piensa que no lo logrará. Además, el 31 por ciento prefiere no pronunciarse al respecto. Analizado por grupos de edad, los que más confían en la capacidad del PP para conseguir este objetivo son los mayores de 65 años y, frente a ellos, los de 18 a 29 años no pondrían la mano en el fuego por el líder popular.
Ya metidos en pactos, acuerdos y negociaciones, los electores también valoran las diferentes posiciones y posturas que deberían tomar las formaciones para recuperar la normalidad política. Primero, en cuanto a lo que debería hacer el segundo partido más votado, el PSOE. Hay un 62,1 por ciento de ciudadano que cree que los de Pedro Sánchez deberían abstenerse en la votación de investidura para dejar el camino libre a un Ejecutivo liderado por el PP, mientras que el 27,7 por ciento considera que no, que los socialistas no han de facilitar su continuidad en la Presidencia del Gobierno. Únicamente el 10,2 por ciento no tiene demasiado claro qué contestar a esta pregunta. Aquí, los españoles con edades comprendidas entre los 45 y 64 años son los que más defienden esa abstención socialista y los más jóvenes (18 a 29 años), los que rechazan que el PSOE deje el camino libre a los populares.
En segundo lugar, los encuestados también hacen referencia a la forma en la que el PP debería de gestionar ese Gobierno que encabezaría como la lista más votada. La opción más apoyada es la de la gran coalición entre PP, PSOE y Ciudadanos, defendida por el 44,8 por ciento de los electores, pero no por uno de los actores principales de la misma, el partido de Pedro Sánchez, que por activa y por pasiva ha repetido que no se sumará a este Ejecutivo a tres. La segunda opción real más apoyada por los ciudadanos es la de un Gobierno del PP en solitario, que se sitúa muy alejada de la primera, con un 14,7 por ciento. Y, entre medias, hay un 30,4 por ciento de españoles que no aceptaría ninguna de las dos posibilidades y abogaría por otro tipo de acuerdos de cara a la investidura de un presidente.
La gran coalición es la forma de gobierno que más valoran los encuestados de entre 45 y 64 años, mientras que la de los populares en minoría la secundan con más fuerza los mayores de 65 años. El rechazo a ambas opciones es mucho mayor entre los jóvenes de 18 a 29, que siguen mostrándose como los más críticos.
Por último, otra de las claves para que la lista más votada sea la que finalmente presida el Ejecutivo durante la XII Legislatura es la exigencia por parte del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, de que Rajoy se eche a un lado y deje el liderazgo a otro miembro desu partido para, de esta forma, ofrecerle su apoyo (o en su caso abstenerse). Una posibilidad esta que, para el 78,6 por ciento de los encuestados no facilitaría la tan ansiada formación de Gobierno, mientras que para el 12,1 por ciento, por el contrario, sí que sería imprescindible para desbloquear la situación que se vive desde diciembre.
De nuevo, los ciudadanos más jóvenes son mayoría a la hora de considerarlo como algo necesario, frente a los del grupo de 45 a 64 años, que no lo ven un problema para allanar a Rajoy el camino a La Moncloa.
